Caracas. El gobierno de Chile debió suspender la deportación de Jesús Alberto Rondón, un venezolano de 60 años víctima de un accidente cerebrovascular (ACV), que permaneció retenido en el aeropuerto de Santiago durante más de 30 horas.
La decisión de suspender la deportación sucedió luego de la denuncia realizada el sábado 23 de noviembre por el director nacional del Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) en Chile, José Tomás Vicuña, quien señaló que Rondón arribó a Chile, acompañado por su esposa, a quien sí dejaron ingresar.
“Hoy de madrugada Jesús Alberto Rondón….¡¡Ingresó a Chile!! 😊🎉🎊
Muchas gracias a todas las personas e instituciones que ayudaron en la difusión y en el aeropuerto. Ya está con su familia, luego de haber estado más de 30 horas retenido #LibertadParaJesús”, informó Vicuña este lunes 25 de noviembre en su cuenta de Twitter.
Tras la denuncia, el sacerdote jesuita relató que personal del Instituto Nacional de Derechos Humanos en Chile (Inddhh) llegó al aeropuerto el domingo 24 de noviembre, en compañía de varios médicos.
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“El médico del aeropuerto impidió que lo deportaran en las próximas 24 horas”, informó Vicuña. Sin embargo, agregó que desde RREE (Relaciones Exteriores) “se niegan a solución humanitaria”.
El sacerdote jesuita explicó que Rondón sufrió un ACV y decidió vender “todo” en Venezuela para irse a vivir a Chile con su hijo, que reside en la ciudad de Viña del Mar.
“Su señora vino con él y la dejaron entrar. Lo quieren devolver solo, sin nadie (…) Hoy mueve el brazo izquierdo y apenas puede hablar. Lleva 24 horas retenido en el aeropuerto. Lo quieren deportar solo..SOLO!!”, denunció Vicuña en su cuenta de Twitter el sábado 23 de noviembre.
Se supo que la Policía de Investigaciones de Chile impedía la entrada de Rondón bajo el argumento de que su visa pertenece al conjunto de documentos investigados en un caso de estafa hecho público recientemente.
El sacerdote indicó que Rondón, al igual que otras 200 personas, fue estafado por un funcionario del Consulado de Chile en la ciudad de Puerto Ordaz, estado Bolívar, con la visa de responsabilidad democrática.
Vicuña afirmó además que, aunque el Servicio Jesuita a Migrantes en Chile conversó con las autoridades de ese país, la decisión de deportarlo seguía vigente el fin de semana.
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“Ayer (sábado) se habló con autoridades de gobierno, pero dijeron que no podían hacer nada. ¿Dónde quedó la preocupación por los derechos humanos?”, se preguntó Vicuña en su cuenta Twitter, donde colgó un video en el que puede verse a Rondón sentado en una silla de ruedas y hablando con dificultad.
“¿De verdad no puede haber un criterio humanitario acá? 60 años, sin dinero, apenas se mueve, solo. Incluso la aerolínea no quiere subirlo y migraciones se niega a recibirlo. #LibertadParaJesús”, añadió Vicuña.
El Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) se define como una institución que promueve y protege la dignidad y los derechos de las personas que migran a Chile, «acompañando su proceso de inclusión social, a través de un modelo de trabajo multidimensional e incidiendo en la sociedad para que reconozca la riqueza de la diversidad humana.