Guanare.- Las organizaciones sindicales de los docentes del estado Portuguesa se declaran en desobediencia laboral. Los líderes del magisterio aseguran que los maestros no se incorporarán a clases en ninguna de las modalidades propuestas por el Ministerio de Educación.
“No participaremos en el programa de educación a distancia por Internet ni en la jornada 7+7”, ha dicho la dirigente Aura de Chávez, secretaria general de Fetramagisterio.
«La desobediencia laboral la adelantamos como una medida de presión para que el gobierno acepte la exigencia de elevar nuestros salarios a $600 por mes«, dijo de Chávez. La dirigente esgrime que los educadores no están dispuestos a seguir aceptando la colaboración de $1 quincenal, que es lo que les paga el Ministerio de Educación por los servicios prestados.
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Ana María Mariño, dirigente sindical en Acarigua, sostiene que los docentes seguirán en la calle hasta tanto el gobierno acepte el diálogo con todas las federaciones del magisterio y se siente a discutir las cláusulas laborales y de previsión social.
“No contamos con seguro médico ni funerario. Nuestros pensionados y jubilados están muriendo de mengua y muchos de ellos haciendo labores domésticas y cumpliendo faenas de obreros en fincas agrícolas”, señaló Mariño.
También desde Acarigua se pronunció el dirigente Iván Bravo, quien exhortó a los educadores a sumarse a las protestas y a no tener miedo. “No debe atemorizarnos la convocatoria de los directores y supervisores escolares, no tenemos nada que perder pues la miseria que nos cancelan no puede llamarse sueldo y salario, es más bien una colaboración lo que percibimos», señaló Bravo.
Desde el parque Concha Acústica, en Guanare, se hizo escuchar Yulimar Mora, secretaria general del sindicato autónomo de docentes del estado. No justifica un retorno a clases con salarios invariables en el marco de una hiperinflación.
“Si nuestro salario promedio está en Bs. 2.000.000 y el costo de la cesta básica se calcula a la fecha en Bs. 91.000.000, es absurdo que nos convoquen a trabajar con hambre», dijo.
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Este jueves 15 de octubre hubo dos protestas docentes en las ciudades de Acarigua, Araure y Guanare, en la capital de la entidad. Desde allí estos trabajadores ratificaron la desobediencia laboral y convocaron para el el próximo 21 de octubre a una nueva jornada de calle. Seguirán exigiendo reivindicaciones económicas y laborales.
El pasado 5 de octubre pequeños grupos de maestros protestaron en los 14 municipios de Portuguesa contra el reinicio de las clases por la falta de medidas de bioseguridad, equipamiento y bajos salarios. La convocatoria se cumplió en acatamiento de una jornada nacional programada por la coalición magisterial.