Valle de La Pascua.- Vecinos de la urbanización La Trinidad, en la ciudad de Valle de La Pascua, estado Guárico, denunciaron que desde hace más de cuatro años están afectados con el desbordamiento de aguas servidas. Esta situación, al pasar los días, sigue empeorando, debido a que las aguas de cloaca se regresan por las pocetas e inodoros de las casas. Para los afectados, esto representa un problema de salud pública para esta zona del municipio Leonardo Infante.
Para conocer sobre esta situación, el equipo de El Pitazo se trasladó al mencionado sector y logró recopilar declaraciones de varias amas de casa que piden a los entes responsables que se aboquen a solventar este foco de insalubridad que les ha mermado la poca calidad de vida que tenían. Dijeron haber acudido a las instancias correspondientes en busca de soluciones y, hasta la presente fecha, no han sido escuchados. Indicaron que esta misma situación la viven en la urbanización La Trinidad y en los barrios 4 de Febrero y Bendición de Dios.

Sixta Ortega informó que son muchas las penurias que tienen que pasar a diario a causa del desbordamiento de las cloacas, ya que incluso este problema les generó otro como es el del mal estado de las calles donde se han formado enormes huecos que han tenido que tapar con pedazos de ladrillos y relleno que han pagado su dinero.

“Desde hace muchos años nosotros estamos padeciendo este problema del desbordamiento de las cloacas, los malos olores y los charcos de agua podrida que corren por las calles, lo que ha generado problemas de salud que ha afectado tanto a niños como adultos incluso a jóvenes de la zona. Aquí han aparecido enfermedades de la piel como escabiosis, sarpullidos e incluso infecciones respiratorias, porque lamentablemente el gobierno de turno no da respuesta a nuestras necesidades”, comentó.
Gloria Amparo Hiraldo expresó que aunado al problema de las aguas servidas se suma la falta de agua potable, luz y vialidad, entre otros. Por ello, invitó a la alcaldesa Nidia Loreto para que se acerque y vea casa por casa la difícil situación que ellos viven en los actuales momentos.
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“A los vecinos nos cuesta mucho comprarle al cisternero un tanque de mil litros de agua porque es muy costoso. Este problema nos aqueja a todos los vecinos de la comunidad y cuando el agua nos llegaba por la tubería venía contaminada, ya que se mezclaba con las aguas negras”.
“Son muchos los niños que se enfermaron al ingerir esta agua en esa oportunidad, le hacemos el llamado a la alcaldesa Nidia Loreto para que se aboque a trabajar y darnos una pronta solución, porque Dios la puso en el cargo que tiene para que trabaje en beneficio de los ciudadanos. Todas nuestras casas están colapsadas y como tal no podemos ni bañarnos en los baños, el estado de insalubridad en que nos encontramos es crítico y por consiguiente nuestra salud está en peligro”, comentó.

Por su parte, Yerlín Izquiel destacó: “En mi casa tengo a dos gemelas que están enfermas por este problema, igualmente en el sector hay niños que tienen llagas en la boca, sufren constantemente de diarrea y desnutrición y no hay medicamentos para quitarles la fiebre. Cuando vamos al CDI los médicos nos dicen que le demos aguas de mata a los infantes, esto es inaudito porque no sabemos cómo va a reaccionar el cuerpo de un niñito si le damos este tipo de medicinas naturales”.

“Acudí a la junta comunal y le planteé mi problema, porque las aguas negras se regresan y colapsan mi casa, lo que dicen es que están resolviendo y no vemos resultados. Según trajeron unos tubos y resultó que no eran para el sector, dijeron que iban a traer otros y nada”, inquirió.

Izquiel mencionó en su sector todo llega tarde, que hay problemas con la distribución de la comida. Informó que desde hace tres meses esperan a que les entreguen las cajas Clap y aún no las reciben. Agregó además que en diciembre pasado los castigaron al no entregarles este beneficio.
Los vecinos expresaron que cuando llueve el sector se inunda y el agua les llega a las rodillas, sobre todo en las calles 8, 9 y 3. En tiempos de lluvia parecen un río, debido a que toda el agua que baja prácticamente desemboca por esta arteria vial que sirve como especie de aliviadero que culmina en las quebradas que están en las adyacencias del sector. En tal sentido, solicitan que les reparen las cloacas y calles antes de que se inicie la temporada de lluvias.