San Carlos.- Residentes del barrio Érika Farías de la parroquia Sucre, municipio Girardot, en el estado Cojedes, denuncian las precarias condiciones en las que viven 30 familias de esa comunidad. Indicaron que tanto el gobierno regional como el municipal han sido indiferentes a sus múltiples peticiones de ayuda para mejorar su calidad de vida.
Los pobladores de esa comunidad rural de Cojedes se comunicaron con El Pitazo, el martes 10 de agosto, para que se hiciera pública la situación que padecen estas humildes familias que viven en ese sector.
Daniela Sulbarán, quien reside en la comunidad de Érika Farías, aseguró que no cuenta con un sistema adecuado para el suministro de agua potable. Dijo que tampoco tienen un mecanismo idóneo que les garantice el tratamiento de las aguas residuales de quienes allí habitan.
La vocera de los afectados explicó que la situación de las familias ha empeorado con la llegada de las lluvias al lugar. Mencionó que las condiciones de la vía son deplorables y que deben ingeniárselas para entrar y salir del barrio.
“Aquí en el barrio Érika Farías, de la población de Sucre, vivimos en completo abandono. No hay ni un gobierno, ni una sola persona que se preocupe por el bienestar de las familias que aquí vivimos”, sostuvo la vecina.
Sulbarán señaló que la vía que une a la población de El Baúl con la parroquia Sucre también se encuentra en muy mal estado. Destacó que como no tiene desagüe se complica aún más la situación. Agregó que tampoco hay un gobierno responsable que se dedique a limpiarla.
A pesar de lo indolentes e indiferentes que han sido las autoridades municipales y regionales, los pobladores de la parroquia Sucre nuevamente les hacen un llamado, pues aún albergan la esperanza de que reaccionen y les puedan brindar el apoyo y la ayuda que requieren.