Barinas.- Por amenazas de muerte, acusaciones infundadas y campaña intimidatoria contra él y cinco mujeres fieles católicas el padre Marcos Galvis renunció a sus oficios religiosos, en la urbanización La Castellana de Barinas.
El presbítero es recordado en Venezuela, porque durante una misa celebrada en Sabaneta, el domingo 10 de octubre de 2021, con un verbo encendido, dirigió su sermón al robo, poniendo como ejemplo de ese condenable acto, sin nombrarlos, a familiares del difunto presidente Hugo Chávez.
Este domingo 24 de julio, Galvis anunció, durante otra misa, esta vez en la urbanización La Castellana, con sede en la ciudad de Barinas, que no oficiará más la santa eucaristía ni continuará con las gestiones para la construcción de la capilla católica en honor a Nuestra Señora de Guadalupe. “Me quieren matar”, informó a los vecinos durante el sermón. La advertencia también fue grabada en un video que, posteriormente, difundió en sus redes sociales.
“Simplemente por querer hacer una capilla me interceptaron dos personas: un hombre y una mujer. Y me dijeron, padrecito, si usted sigue molestando en querer hacer la capilla en La Castellana van a haber consecuencias”, denuncia Galvis.
La Alcaldía de Barinas, administrada por el dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), Rafael Paredes, ha negado, por omisión, los permisos de construcción de la capilla católica, recordaron los feligreses a través de las redes sociales.
“En primer lugar, tenemos una lista con fotografías de cinco personas (cinco mujeres) que nos vamos a llevar detenidas. Nos las vamos a llevar detenidas, porque están involucradas en la construcción de la capilla, y si usted no hace caso y no tiene miedo, pues, entonces su vida corre peligro”, señala también el joven sacerdote en la pieza audiovisual.
El padre Galvis revela que las personas que lo interceptaron le aseguraron que “también se puede morir”, además de que lo amenazaron con crearle varios escenarios delictivos. “Lo vamos a acusar de pederasta, lo vamos a culpar de violación infantil, de pornografía infantil… lo vamos a acusar de que usted tiene mujer, que es un borracho, un homosexual. Usted verá qué hace”.
En la misa de este domingo, el padre Galvis dijo no tener miedo de que lo acusen, porque ya lo han actuado bastante. No obstante, afirma que se retira porque le dolió que se hayan metido con la gente de La Castellana, que tiene años luchando por una capilla. «No me da miedo por mí, sino por esta gente que son padres y madres de familia de bien y se los quieren llevar detenidos”, asegura.
“Hoy le dije a la gente de La Castellana hasta aquí los acompaño en su lucha por la capilla, hasta este día les vengo a celebrar la misa”, se oye en el video.
Galvis hizo un llamado de atención al alcalde de Barinas, Rafael Paredes, para que se ocupe de la situación. “Yo hablé con el alcalde, se habló con el síndico, con el prefecto, con los que dan las fichas catastrales, con todos… y no les dio la gana de dar permiso para hacer una capilla, pero vinieron unos, no sé quiénes, a acusarme de que yo quiero desordenar y entonces me amenazaron de muerte y amenazaron con cárcel o muerte a las personas que me están ayudando. Entonces por eso me retiro”, sentenció.