Barinas.- La directiva de la Asociación de Productores Rurales del Estado Barinas (Asobarinas), denunció el jueves 18 de julio que se reactivaron las invasiones en tierras llaneras, esta vez acompañadas de amenazas y extorsiones.
Los gremialistas alertaron que con estas nuevas incursiones de invasores profesionales amparados en la figura de cooperativas campesinas se pone en riesgo la producción alimentaria del estado Barinas, ya mermada por las expropiaciones, la escasez de insumos y la falta de financiamiento.
Aseguraron que actualmente existen 680.950 hectáreas de territorio del estado Barinas afectadas por invasiones, de las cuales hay 405.600 expropiadas por el Gobierno y sus cooperativas y, el resto en conflicto, es decir, 20 por ciento de la superficie del estado Barinas.
Apoyada en el trabajo desarrollado por Yoset Pérez, experto en topografía y cartografía, Asobarinas, presidida por José Labrador, aclara que según sus registros, esas cifras podrían ser superiores, porque hay casos recientes que no han sido incluidos en dicho estudio, el cual comprende 478 fincas afectadas en los últimos 20 años.
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De acuerdo al estudio realizado por los productores, de 190 casos que inició el Instituto Nacional de Tierras (Inti), 183 terminan en rescate conclusivos. «Solo 16 se salvaron, pero habría que revisar si no están invadidas en este momento o si están produciendo», precisó la directiva.
Desde Asobarinas, los productores conminaron a las autoridades del país a que expliquen dónde están los insumos.
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Se preguntaron qué ha pasado con las tierras que se entregaron y comentaron que en la Secretaría Ejecutiva de Seguridad y Orden Público (Sesop) de la Gobernación conocen quiénes son esos invasores de oficio.
Consideraron como inconcebible que desde el Consejo Legislativo del Estado Barinas (Cleb), les presten apoyo a las invasiones cuando anuncian que van a ejecutar rescates de tierras, usurpando funciones del Inti.
Para los voceros del sector agrícola, es crucial que los organismos asuman su responsabilidad. «Los venezolanos y las mismas autoridades conocen el modus operandi: perturban, saquean y llega el Inti con los invasores, que luego abandonan o venden la unidad de producción», comentaron.