El ingreso de unidades de transporte público al estado Táchira está prohibido desde el sábado 16 de enero por el incremento de casos positivos de COVID-19. La sorpresiva medida mantiene a muchos venezolanos varados en la frontera, localidad donde también fue suspendida la movilización de autobuses.
El terminal de San Antonio del Táchira fue cerrado y el alcalde, William Gómez, detalló que la orden del Ministerio de Transporte señala que los municipios fronterizos no podrán recibir ni transportar pasajeros. El puerto terrestre está cerrado desde el sábado 16.
Quienes llegan a Venezuela desde otros países y cruzan la frontera a través de los pasos irregulares o trochas no han podido retornar a sus hogares por no tener cómo y tampoco tienen cómo pagar los carros particulares que les ofrecen el servicio.
El Pitazo pudo conversar vía telefónica con María Urdaneta, una mujer de 35 años que luego de 12 días de colas y caminatas llegó a San Antonio con su hija de 5 años y su mamá, de 62. Están varadas sin poder regresar hasta Valencia, estado Carabobo.
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“Yo no sabía que no se podía viajar a otros estados; nos vinimos por necesidad. Traía 100 dólares y en las trochas tuvimos que dejar 30 para que nos permitieran cruzar con las dos maletas. Un taxista nos cobraba 80 dólares por cada una y no tenemos ese dinero. Estamos en el medio de la nada. Pagamos en un hotel 10 dólares el sábado, 10 el domingo y ya no podemos más porque también gastamos en comida, aunque nos han ayudado”, relató Urdaneta.
La Iglesia católica y Organizaciones No Gubernamentales son quienes las han ayudado en este momento para desayunar y cenar, pero también debieron comprar agua, ibuprofeno y los almuerzos de la pequeña niña, a quien no quieren dejar pasar hambre.
No tiene certeza de qué pasará con ella y su familia. Durmieron escondidas en un callejón, entre dos casas, por temor a algún problema con policías o militares, y probablemente continúen así hasta poder viajar en autobús a sus hogares.
Hay quienes optan por caminar desde la frontera hasta sus estados de residencia. Espera que esa sea la última opción, pues teme que su mamá e hijas no aguanten tanto trayecto a pie. “En Colombia caminamos un poco, pero en Venezuela es distinto, porque aquí nos pueden violar, matar o robar debido a que la delincuencia es extrema”, precisó.
El ministro de transporte, Hipólito Abreu, informó que durante la semana radical no habrá movilización de unidades de transporte. Así que será el domingo 24 de enero cuando se conozcan nuevos lineamientos en esta materia.