Los habitantes de Esdorá, en el municipio Trujillo del estado homónimo, denuncian que no tienen garantías de atención médica oportuna. Aseguran que aunque cuentan con un dispensario y con una enfermera delegada, ésta no presta la atención requerida de forma continua.
La enfermera encargada del dispensario casi nunca se encuentra en el lugar en su horario de labores, según la información proporcionada por los residentes del lugar. “No, ella es más lo que no trabaja que lo que trabaja, por lo menos ahí casi nunca está, tienen que estarla buscando en su casa o donde esté”, indicó una vecina que vive cerca del dispensario.
El caserío de Esdorá es un campo de la parroquia Andrés Linares, en el municipio Trujillo. Está ubicado a dos horas (aproximadamente) de San Lázaro, el pueblo más cercano con ambulatorio, y a tres horas de Trujillo capital donde está el hospital más cercano.
La mayor parte de la carretera que conduce a este campo es terreno de piedras, por lo que movilizarse desde y hasta allá no es tan fácil. Desde San Lázaro no hay rutas de transporte público, los lugareños solo se trasladan en vehículos particulares, principalmente motos. Sin embargo, no todos tienen acceso a un vehículo, por lo que tener una atención médica de primera instancia es tan importante para la comunidad.
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Reclamos por casos no atendidos
De acuerdo con lo dicho por los habitantes, van por lo menos dos casos de falta de atención médica en los que los pacientes necesitaban ser revisados con urgencia, pero al llegar solo encontraban al personal de limpieza.
El primero fue el del señor Pablos Quintero, a quien llevaron con hipertensión al dispensario y la enfermera no estaba en el lugar, la buscaron en su casa pero se negó a atenderlo, según manifestó Amalia Fernández, habitante de La Tuna, un caserío conjunto. “Lograron controlar la tensión gracias a Elena, que es enfermera jubilada y vive cerca”, relató Fernández.
El segundo caso comentado por Fernández fue más reciente y le implicó directamente, pues la paciente era su madre. La señora Delia, quien enfermó hace aproximadamente tres meses, requería servicios médicos de emergencia y al llevarla al dispensario lo encontraron cerrado.
Sus hijos la llevaron hasta San Lázaro pero en el ambulatorio tampoco estaban trabajando por lo que tuvieron que llevarla de inmediato al otro pueblo más cercano, Santiago.
Según Fernández, la enfermera ya tiene dos reclamos presentados a las autoridades respectivas en el municipio Trujillo, pero aún están a la espera de una respuesta oportuna y eficiente para la comunidad de Esdorá.