Valera- Los representantes de la Unidad Educativa Nuestra Señora de la Candelaria, ubicada en el sector La Beatriz, del municipio Valera, solicitaron a la Zona Educativa, del estado Trujillo, la reparación de tres refrigeradores del comedor de la institución, durante la mañana de este miércoles, 4 de diciembre.
Aseguraron que está en riesgo la alimentación de 840 alumnos, de primer grado a quinto año. Hace 20 días se dañó el motor de la más nueva, pues las demás tienen cuatro años imperativas.
“Nuestro llamado es a las autoridades y organismos competentes para que se enfoquen en ayudarnos. Esto perjudica a los niños y niñas. Es de suma importancia, que el comedor siga funcionando para los niños que no tienen esa posibilidad en casa” manifestó Johana González, una de las representantes.
Colaboración insuficiente
En las asambleas escolares, la coordinación del Programa de Alimentación Escolar (PAE) y los padres, acordaron recaudar fondos, pero han sido insuficientes.
“Nosotros hemos logrado reunir 1200 (1.200.000) bolívares y para dar un presupuesto específico no se puede dar. La cuota sigue subiendo. Cuando ya tenemos el monto y vamos a pagar, cambia. Como representantes hemos llegado hasta donde pldemos» detalló González.
LEE TAMBIÉN
Continúan las protestas en San Cristóbal para exigir gas doméstico
La coordinadora del PAE, la profesora Karlina Parra, explicó que están a la espera de un nuevo despacho de alimentos, pero no tienen dónde almacenarlos.
“Esperamos el despacho y solamente recibiremos los víveres, porque lo que amerita refrigeración, como las proteínas, se nos hace difícil guardarlo en otras instituciones. Hace 15 días se recibieron víveres y pollos, que se guardaron en un preescolar y en casa de una secretaria, pero no es el deber ser» declaró Parra.
Contó que la Zona Educativa está al tanto del problema, e incluso los alumnos de quinto año lo manifestaron al gobernador en un acto público. “Dijo que están movilizándose para solucionar”.
Remodelación de infraestructura
La escuela también amerita una reparación de las tuberías, que impiden el correcto funcionamiento de los baños en el segundo piso; y dotación de pintura.