Por: Oriana García
Mérida.- El coordinador en Mérida del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), Gustavo Páez, indicó que en lo que va de año se han registrado 28 casos de suicidio en el estado, calculados por fuentes oficiales no públicas debido a que no todos los casos logran ser conocidos por la sociedad a través de los medios de comunicación.
“Si lo comparamos con cifras de años anteriores, es muy probable que este año superemos de nuevo la cifra del año pasado”, indicó Páez en una entrevista con el equipo de El Pitazo. Asimismo, resaltó que en el año 2020 fueron documentamos 18 casos, para el 2021 se registraron 45 casos y, finalmente, para el año 2022 hubo 55 casos de suicidio.
Las principales causas comunes de muertes autoinfligidas en Mérida, registradas por el OVV, se deben en primer lugar a la personalidad y cultura del merideño, quien no expresa los sentimientos negativos, así como a la aparición de trastornos mentales, consumo excesivo de alcohol o drogas, entornos sociales y familiares deteriorados, fracasos sentimentales, laborales o académicos, acoso escolar y una orientación sexual no asumida.
Páez declaró que la muerte por suicidio no se le puede atribuir a un solo factor, ya que existen elementos que se suman y llevan a la persona a tomar la decisión de quitarse la vida. Sin embargo, enfatizó que el 90% de las causas se debe a la depresión, conflictos familiares y sentimentales.
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Sobre este problema de suicidio, la psicóloga Valentina Berrios, a quien el equipo de El Pitazo consultó, manifestó que la escucha activa es una herramienta importante para las personas con trastornos depresivos, así como el acompañamiento y el incentivo a que busquen ayuda psicológica o psiquiátrica.
“Pienso que la salud mental debe ser trabajada al igual que la salud física. Por ejemplo: si en nuestra rutina está el desayunar al levantarnos, así mismo debemos incorporar acciones continuas para el cuidado de nuestra salud mental. Esto significa crear espacios de cuidado, amor propio, socialización y crecimiento personal, es decir, pequeñas acciones, como el agradecer algo bueno en el día. Esto beneficia nuestra salud mental”, expresó la especialista.
Finalmente, Páez expresó la necesidad de tomar medidas relacionadas con el sistema de salud mental en Mérida. Una de ellas es que los entes municipales proporcionen servicios de atención y acompañamiento social integral en las comunidades, así como que se promuevan estrategias de promoción y prevención en materia de salud mental.