San Cristóbal.- Con poca circulación vehicular y peatonal, escasos comercios abiertos y largas colas por combustible ha permanecido la ciudad de San Cristóbal durante el primer día de la cuarentena decretada por Nicolás Maduro para evitar la propagación del coronavirus. La denominada cuarentena social comenzó este lunes, 16 de marzo, a las 5:00 am.
Durante un recorrido realizado por El Pitazo en los principales supermercados, se observaron compras nerviosas de alimentos no perecederos, carnes y embutidos. Algunos ciudadanos con tapabocas transitaron en vehículos, motocicleta, bicicleta y caminando. Otros portaban además guantes y lentes.
Las farmacias permanecieron abiertas. Circularon camiones del aseo urbano con los trabajadores usando tapabocas y también hubo unidades de transporte público que realizaron sus recorridos. Las panaderías laboraron con puertas cerradas y por ello se formaran colas fuera de los establecimientos. En algunos puntos de venta de alimentos aplicaban jabón antibacterial a los compradores al ingresar a sus negocios.
Algunos supermercados disminuyeron la venta de productos de la cesta básica. Tan solo dejan adquirir tres debido a que la noche del domingo las compras nerviosas los tomaron por sorpresa y hubo quienes llevaron en grandes cantidades para sus hogares.
LEE TAMBIÉN
Ciudades mirandinas lucen desoladas durante primer día de cuarentena
Con máscara de gas
En un supermercado de San Cristóbal la mayoría de los ciudadanos tenía tapabocas, pero un joven optó por usar una máscara antigas para protegerse. Su nombre es Cristhian Moreno, tiene 20 años de edad y considera que no hay mejor medida de prevención que su máscara de gas, la cual puede limpiar cuantas veces sea posible.
“Hay que ubicarse uno en espacio y tiempo. Busco la manera de no contaminarme y no contaminar a las personas. Uso guantes, la careta y tomo guarapos calientes para prevenir todo virus que llegue. Evito saludar de manos en la calle, digo hola, chao, y llego a la casa a hacer gárgaras de sal”, acotó.
LEE TAMBIÉN
Así está Caracas durante el primer día de cuarentena por coronavirus
Elías Márquez salió a comprar alimentos para llevar a su familia. Vive junto a su mamá, de 56 años de edad; su hermana y su abuela, de 83 años de edad. Llevaba tapabocas para evitar contaminación, pero adicional a ello está tomando ácido fólico y hace gárgaras de ajo caliente para que el virus no ingrese a sus vías respiratorias. “Tendremos que acatar los 40 días. ¡Qué más toca!”, agregó.
Orlando Useche es de El Cobre. Llegó a una clínica en San Cristóbal a hacerse exámenes preoperatorios y lo agarró el anuncio de cuarentena. Estaba asustado, pues no entendía bien si podía regresar a su casa y le preocupaba tener que pagar hotel tantos días, pues no cuenta con recursos suficientes.
“Anoche entré en pánico porque me imaginé que ni podía salir de la casa. Esta mañana temprano llamé al doctor y me dijo que sí atendía. Vine y noté que todo está en relativa calma. Espero poder regresar a mi hogar. Para la operación todavía faltan unos días”, agregó.