Mérida.- «Los golpes no son violencia», dijo uno de los policías del Estado Mérida mientras hostigaba a un menor de edad, pidiéndole el nombre de manera amenazante, joven quien fue agredido por una policía de apellido Monzón, la cual violentó a varias mujeres dejándoles moretones en los brazos y manos durante protesta en contra de un desalojo arbitrario este lunes 27 de mayo.
Los organismos de seguridad acompañaban a una comisión en la cual se encontraba la juez Francina de Monsalve, quien se disponía a desalojar arbitrariamente del edificio Chama, ubicado en el centro de la ciudad, en la calle 31 entre avenida 2 y 3, a una familia que tiene viviendo en el lugar más de 15 años.
El edificio fue vendido a Akad Saab, quien compró la propiedad hace 10 años, sin embargo, no le dieron opción a compra a los inquilinos que en algunos casos llevan más de 50 años viviendo en la residencia.
«Ellos van a regresar, ellos son muy violentos, así hicieron la vez pasada, entraron con unos delincuentes en la noche sin respetar a nadie», dijo la señora Irma, una de las afectadas, quien mostró moretones en sus brazos y manos, además recalcó que los morados se los había hecho la funcionaria que identificó de apellido Monzón. «La juez también me agredió», dijo.
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Cabe resaltar, que en los meses noviembre y diciembre unos hombres ingresaron al edificio «Chama» sin ningún tipo de autorización, hurtaron propiedad de los inquilinos y luego pusieron cadenas para que estos no pudieran ingresar a sus viviendas.
Por su parte, Lidy Correa, quien es la abogada de Akad Saad, explicó para El Pitazo que no se estaba realizando ningún desalojamiento arbitrario. «La inquilina y la comunidad están queriendo hacer ver esto como un desalojo arbitrario, pero eso no es así, esto lleva 10 años, es un juicio breve, lo que se está realizando es un acto de justicia», aseguró Correa. Asimismo, reitero que el proceso agotó todas sus etapas por lo cual el tribunal ratificó las medidas de desalojo.
En contraste, Gerardo Puentes, quien es abogado y conoce del caso de los desalojos en el edificio Chama, afirmó que es un desalojo arbitrario debido a que no se han respetado algunos procedimientos, como la oferta de compra venta para los inquilinos, sino que este fue vendido al señor Akad Saad.
«Es importante señalar que hay una comisión de policías del estado Mérida, Policía Nacional Bolivariana junto con los cuerpos del tribunal Primero del Municipio y está la juez Francina, le están violando todos los derechos a la inquilina», dijo Puentes, quien resaltó que una de las inquilinas fue agredida por parte de la juez Francina de Monsalve.
Puentes aseguró que los desalojos arbitrarios no están permitidos, por lo cual se está en presencia de abuso de poder.
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