Táchira.- Las constantes fallas de luz en el estado Táchira generan que el trabajo que realiza el personal médico del hospital General de Táriba, en el municipio Cárdenas, se vea afectado, pues en el centro asistencial no hay planta eléctrica y los apagones reiterados. Según el personal, influye que el centro no está marcado el circuito como prioritario.
Un trabajador del hospital contó a El Pitazo la situación que viven cada noche cuando les quitan la energía eléctrica y el funcionamiento de todos los pisos se ve afectado. «Se paraliza la emergencia, a menos que los teléfonos tengan carga y nos ayudamos con eso. Los pisos colapsan porque no pueden cumplir tratamiento», denunció, este 7 de abril, el trabajador que pidió el resguardo de su identidad por temor a que le sea firmada un acta o incluso lo despidan.
Por su parte, otra trabajadora del hospital de Táriba denunció las pocas medidas de seguridad y prevención ante el COVID-19, pues en el piso 2 se encuentran los pacientes sospechosos y no está habilitado como un área de aislamiento, además que cuando no hay luz temen que alguno tenga una complicación respiratoria y no puedan prestarle apoyo por no haber electricidad.
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«La ropa desechable solo se la dan a los enfermeros que trabajan en el área de COVID-19. La orden es guindarlo en un paral, rociarlo de hipoclorito y usarlo de nuevo. El resto del personal trabaja con su uniforme normal, pero el problema es que quienes están con los pacientes sospechosos también atienden a otros por la falta de personal», indicó.
Aunado a ello, tampoco hay jelcos de ningún calibre, ni adhesivo. Aunque hay guantes y tapabocas, ambos insumos deben utilizarlos en varias oportunidades porque son pocos.
La noche del pasado 4 de julio, a través de Whatsapp, trabajadores del hospital publicaron una foto donde se observaba un escrito sobre una hoja: «otra noche sin luz en el Hospital General de Táriba. Sin planta eléctrica», rezaba el texto.