Este sábado 5 de marzo, la venezolana Glenda Boscán, quien vive en la ciudad de Sumy en Ucrania, informó que en la zona donde ella reside los corredores humanitarios se encuentran temporalmente suspendidos. Esto debido a que la zona central de la ciudad fu bombardeada.
«Sabemos que hubo bombardeos a uno de los hospitales, a edificios administrativos de la ciudad y las personas están resguardas en los bunkers de sus casas. Sé de siete ecuatorianos que están resguardados en sus casas, que se ayudan entre sí, tratando de resguardar su vida. Créanme no soy la única latinoamericana que está en Ucrania tratando de resguardar su vida«, detalló en un video de su cuenta en Instagram @glenshop1820
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Boscán conversó hace un par de días con el periodista Sergio Novelli y le contó que la zona donde vive se ubica al noreste de Ucrania, muy cerca de la frontera con Rusia. Narró además que llegó a Ucrania hace cuatro años con su hija, tras casarse con un ciudadano ucraniano. «Nos vinimos en busca de una calidad de vida y nos ocurre esta situación que jamás habíamos vivido«, sostuvo.
Añadió que para ella dejar el país con su hija y refugiarse en Polonia, debe atravesar casi toda Ucrania porque se encuentra en el otro extremo. Contó además que le tocaría salir ella con su hija porque su esposo debe quedare en Ucrania. «Todo hombre mayor de 18 años no puede irse del país», precisó.
De hecho, ambos lados del conflicto se responsabilizan de generar bombardeos en la zona. La evacuación de los habitantes de Mariupol, puerto estratégico ucraniano sitiado por las fuerzas rusas y sus aliados, fue postergada a raíz de múltiples violaciones al alto al fuego acordado. Así lo precisó una nota de EFE.