Madrid.- El manifiesto feminista impulsado por mujeres de todo el mundo, entre ellas reconocidas periodistas, escritoras y actrices españolas que han instado a la comunidad internacional a «abrir las puertas a Afganistán y las afganas», ha sido suscrito ya por más de 30.000 personas en apenas 24 horas. El manifiesto se abrió desde este lunes a los hombres, una vez culminada la primera fase simbólica.
El llamamiento llega antes de la videoconferencia de Ministros de Exteriores de la Unión Europea, que este martes analizarán la situación en Afganistán, controlado ya por los talibanes; el paso siguiente será hacerlo llegar al Parlamento Europeo y a ONU Mujeres.
Entre las firmantes hay mujeres de todos los sectores, multitud de personalidades destacadas como la escritora brasileña Nélida Piñón, Premio Princesa de Asturias, galardón que recibió también la norteamericana Siri Hustvedt, que también forma parte de esta iniciativa.
También lo firman las escritoras españolas Almudena Grandes, Rosa Montero y Elvira Lindo; Gabriela Cañas (presidenta de la Agencia EFE); la nueva directora del periódico El País, Pepa Bueno; la del diario Público, Virginia Pérez; y las también periodistas Soledad Gallego-Díaz, Maruja Torres, Rosa María Calaf, Àngels Barceló y Mercedes Milá.
A esta llamada de atención se han sumado otras españolas como la cantante Ana Belén, las actrices Anabel Alonso, Verónica Forqué, Aitana Sánchez Gijón, Pastora Vega, Belén Rueda, Juana Acosta y Ana Fernández y también la matemática Clara Grima.
El manifiesto pide a la comunidad internacional que «exija del poder talibán mantener abiertas las fronteras para que todas las personas que deseen abandonar Afganistán huyendo de un poder fanático impuesto por la fuerza de las armas puedan hacerlo en unas mínimas condiciones de seguridad».
Reclama también que se «respete los deberes elementales de solidaridad y compasión humana admitiendo en los vuelos y convoyes de repatriación de extranjeros al mayor número posible de afganos y especialmente afganas en peligro inminente, hayan estado o no al servicio de Estados o instituciones que los talibanes consideran enemigos».
Y pide atención «a las mujeres en especial situación de riesgo, sea por haber desempeñado tareas profesionales prohibidas por los talibanes, asistido a escuelas y universidades, conducido su vida al margen de una moral fanática o cualesquiera otros motivos».
En las últimas horas, cientos de mensajes e iniciativas inundaron las redes en apoyo a las mujeres afganas y para denunciar la situación en la que quedan tras la salida de las tropas extranjeras del país y el regreso del régimen talibán.