Caracas.- El presidente de Colombia, Gustavo Petro, enjuició este 26 de marzo las últimas declaraciones de Nicolás Maduro en las que el mandatario venezolano criticó a otros gobiernos de izquierda por no condenar los ataques en su contra.
«No hay izquierda cobarde, hay la probabilidad de, a través de profundizar la democracia, cambiar el mundo», escribió el presidente colombiano en su cuenta de X.
Canciller Yván Gil a Colombia por comunicado sobre elecciones: esto solo le compete a…
Nicolás Maduro alertó sobre un presunto intento de atentado contra su vida por parte de miembros de Vente Venezuela. «No solo me persiguen para tratar de atentar contra mi vida, como se demostró ayer con la captura de dos individuos del movimiento terrorista llamado Vente Venezuela, serán veinte terroristas (…) Calla la izquierda cobarde, no son capaces de condenar los golpes contra la revolución y contra la paz. Ellos callan de manera cómplice», afirmó en su discurso.
Petro también mencionó que el objetivo de la izquierda es profundizar la democracia y cambiar el mundo. Además hizo mención del fallecido presidente Hugo Chávez, de quien señaló que propuso un sistema democrático y un cambio en el mundo.
Colombia se pronuncia
Las declaraciones de Petro no han sido las únicas que surgen sobre Venezuela por parte del país vecino. Este martes, en horas más tempranas, la Cancillería colombiana emitió un comunicado en el que señalaba su preocupación por los impedimentos que vivieron algunos partidos de oposición venezolana para inscribir candidatos en las elecciones presidenciales.
Según el documento, las dificultades de inscripción que presentaron la Plataforma de Unidad Democrática y Vente Venezuela podrían afectar la confianza de algunos sectores de la comunidad internacional en cuanto a la transparencia y competitividad del proceso electoral en Venezuela.
Ante el comunicado, el canciller de Venezuela, Yván Gil, calificó las mencionadas declaraciones como un acto de mala fe y dijo que son asuntos que «solo le competen a los venezolanos».
“Empujada por la necesidad de complacer los designios del Departamento de Estado de los EE. UU., la Cancillería colombiana da un paso en falso y comete un acto de grosera injerencia en asuntos que solo le competen a los venezolanos”, dijo Gil en X.
Con información de EFE.