Los jefes de cinco de los siete grupos políticos del Parlamento Europeo instaron este lunes a Bielorrusia a celebrar unas nuevas elecciones supervisadas por observadores internacionales y a que la Unión Europea (UE) imponga «rápidamente» sanciones a los responsables de la violencia en el país.
En un comunicado conjunto, los líderes de los grupos popular, socialdemócrata, liberal, verde y conservador recalcan que consideran al actual presidente del país, Alexandr Lukashenko, persona «non grata» en territorio comunitario, y subrayan que «todas las informaciones creíbles» apuntan a una victoria de su rival, Svetlana Tikhanovskaya.
Los resultados electorales otorgan a Lukashenko un 80,1% de los votos en las elecciones del domingo, que ya han sido denunciadas como fraudulentas por la oposición, cuya líder ha tenido que huir del país.
Los diputados insistieron en que la UE «puede y debe» hacer más para promover la democracia en Bielorrusia, como a través de asistencia a la sociedad civil en este país y deteniendo «cualquier apoyo financiero» al gobierno o a sus proyectos.
LEE TAMBIÉN
Lukashenko se resiste a ceder el poder pese a la presión de la calle
«La UE debe (…) reevaluar sus relaciones con el régimen actual en Bielorrusia en línea con los valores y principios europeos, y reconsiderar su cooperación con Minsk», incidió el manifiesto conjunto.
En este sentido, pidieron que la lista de sanciones sobre la que la UE ya está trabajando «sea compilada lo antes posible» para que a los responsables de violencia y falsificación electoral «se les prohíba visitar la UE y se congelen sus bienes».
Además, los líderes políticos condenan que Bielorrusia negase la semana pasada acceso al país a dos eurodiputados, uno de ellos el jefe de la delegación parlamentaria de relaciones entre la UE y Bielorrusia.
Minsk fue este domingo escenario de una manifestación sin precedentes en la historia de Bielorrusia, en la que más de 200.000 personas exigieron la renuncia del actual presidente, la libertad de todos los presos políticos y castigo para los responsables de la represión policial.