Ankara/Beirut.- Más de 3.000 personas han muerto y otras 15.500 resultaron heridas en la serie de terremotos de Turquía, cerca de la frontera con Siria, y que ha dejado miles de edificios derruidos en los que se sigue buscando a supervivientes en medio de bajas temperaturas.
En Turquía, el recuento de la noche del 6 de febrero elevaba la cifra de fallecidos a 1.760 y de heridos a 12.068, según los datos comunicados por Afad, la agencia de emergencias.
En Siria, inmersa en una guerra civil desde hace más de una década, la información sobre víctimas proviene, por un lado, del Gobierno de Bachar al Asad y, por otro, del último enclave del país controlado por la oposición, rodeado por fuerzas gubernamentales apoyadas por Rusia.
En la zona controlada por el régimen, las últimas cifras hablaban de 593 muertos y 1.411 heridos, según la agencia SANA.
En la provincia noroccidental de Idlib, el último bastión opositor, y en otras partes de la vecina Alepo fuera del control de Damasco, se han contabilizado al menos 700 víctimas mortales y unos 2.000 heridos, según el grupo de rescatistas Cascos Blancos.
Más de 1.500 muertos por terremoto de magnitud 7,7 en Turquía y Siria
La Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) recordó que en estas áreas opositoras, «fuertemente» afectadas por el terremoto, residen 4,1 millones de personas que dependen de la ayuda humanitaria para sobrevivir, y que son en su mayoría mujeres y niños.
Rescatistas buscan víctimas tras terremoto de Turquía
En Turquía, las autoridades informaron de que más 3.700 edificios han quedado destruidos o muy dañados, y que el Gobierno quiere iniciar la evacuación controlada de quienes necesiten salir de las diez provincias más afectadas por el desastre.
Afad, el servicio de emergencias turco, ha informado de que ha desplegado a más de 9.700 rescatistas.
Trece países de la Unión Europea (UE) ofrecieron este lunes, 6 de febrero, equipos de búsqueda y rescate, informó la Comisión Europea, y el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, señaló que 45 naciones han ofrecido ayuda.
En varias de las diez provincias turcas más afectadas, se han producido cortes de gas y electricidad, y en algunos embalses han aparecido grietas, aunque las autoridades afirman que no hay daños estructurales.
El primer gran terremoto tuvo una magnitud de 7,7, según el servicio de emergencias turco Afad, con epicentro en Pazarcik en la provincia turca de Kahramanmaras.
Posteriormente, se produjeron hasta 145 temblores más, uno de ellos de magnitud 7,6. «Debido a que continúan las labores de desescombro en muchos edificios de la zona del terremoto, no sabemos a cuánto ascenderá el número de muertos y heridos», declaró Erdogan esta mañana. El presidente declaró siete días de luto nacional en todo el país.
Las bajas temperaturas y la nieve en la zona, donde también hay territorios montañosos de difícil acceso, complican las tareas de rescate.