Según ha explicado Sánchez, la mesa de diálogo entre Gobiernos es un instrumento que no tendrá la figura de mediador. «El mediador serán los 47 millones de españoles», que serán «testigos» de dicho diálogo «sincero, franco y transparente», dijo Sánchez en su comparecencia ante los medios, tras la reunión que se mantuvo con Torra.
Asimismo, subrayó su intención de estar él mismo en la mesa de negociación entre el Ejecutivo y el Govern. Sánchez recalcó que, en esa mesa, él seguirá defendiendo los mismos postulados de siempre sobre Cataluña.
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Recalcó que él es «un firme defensor del autogobierno integrador, porque entiende que es lo que aglutina a más catalanes y representa mejor la pluralidad». Sánchez ha insistido en que el diálogo que ahora se inicia va a ser largo y no será fácil sino complejo, pero deben hacer ese recorrido «paso a paso».
Evitar «falsas expectativas»
Por su parte, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha pedido este jueves, 6 de febrero, evitar generar «falsas expectativas» con la mesa de diálogo. Tras su encuentro con Sánchez en el Palau de la Generalitat, Torra ha comparecido ante los medios, después del presidente del Gobierno, y ha subrayado que esa mesa de diálogo debe abordar dos cuestiones que están en la raíz del conflicto político y que son, dijo, el «ejercicio del derecho a la autodeterminación y el fin de la represión».
Torra ha trasladado a Sánchez, además, que hay que reconocer a los líderes independentistas presos y exiliados para intentar encontrar una solución política.
MS (efe/dpa)