Bogotá/Caracas.– La dinámica relación comercial de Colombia con Venezuela, un pilar de la buena vecindad que decayó en los últimos años por las tensiones políticas, vuelve a tomar fuerza con la reapertura de la frontera.
El intercambio bilateral, a pesar de los altibajos de las últimas décadas, alcanzó en 2008 un récord de 7.200 millones de dólares, pero el deterioro de la relación derribó en más del 90% las cifras del comercio.
Gustavo Petro y Nicolás Maduro han puesto el pie en el acelerador. El gobernante venezolano afirmó el 9 de septiembre que calcula que con la reapertura de la frontera «pudiéramos llegar a 2.000 millones de dólares de intercambio comercial».
Por su parte, el embajador de Colombia en Caracas, Armando Benedetti, pronosticó que se llegará a los 10.000 millones de dólares en un plazo que no especificó.
Los dos países acordaron también que el gobierno de Maduro tomara el control de la petroquímica Monómeros, ubicada en Colombia y filial de la estatal Pdvsa. Desde 2019 estaba gestionada por el grupo opositor que lidera Juan Guaidó.
Pese al entusiasmo de las partes, los expertos advierten que todavía hay camino por andar porque la interrupción de los últimos siete años y la crisis venezolana dejaron problemas que es necesario resolver, de tipos logístico, migratorio, aduanero, fitosanitario y de seguridad, entre otros, para que el comercio bilateral vuelva a fluir.
En Cúcuta y otras localidades fronterizas que viven del comercio, la gente espera ansiosa la normalización de los flujos de personas y de mercancías entre los dos países.
Puentes fronterizos Bolívar y Santander
Los puentes internacionales Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander serán habilitados para el transporte de carga a partir del 26 de septiembre.
Al acto de reapertura de la frontera ha confirmado su asistencia el presidente colombiano, Gustavo Petro, y está pendiente la de su homólogo venezolano, Nicolás Maduro.