La Paz.- Los candidatos a la presidencia de Bolivia Carlos Mesa y Óscar Ortiz descartaron este miércoles, cada uno por su lado, la posibilidad de formar parte de una coalición única que enfrente en las elecciones presidenciales al presidente del país, Evo Morales, que buscará su reelección para un cuarto mandato.
En una publicación en Twitter, Mesa señaló que la alianza a la que pertenece, Comunidad Ciudadana, «no va a ser parte de una megacoalición» y recalcó que Morales es un candidato «ilegítimo e ilegal».
Por su parte, el senador y candidato por la alianza Bolivia dice No, Óscar Ortiz, indicó que el debate de la unidad de la oposición «quedó atrás» el momento de inscribir las alianzas y sostuvo que algunos candidatos «anteponían sus candidaturas sobre las alianzas».
Ortiz señaló que Mesa «siempre» quiso encarar su candidatura de forma separada a pesar de que su bloque político no estaba de acuerdo con esa posición.
Mesa y Ortiz son considerados los principales candidatos de oposición que terciarán por la presidencia de Bolivia en los comicios previstos para el 20 de octubre próximo.
Varias de las encuestas publicadas en el país en las últimas semanas han otorgado a Mesa una intención de voto alrededor del 30%, mientras que Ortiz figura detrás suyo con un porcentaje que está cerca del 10 %.
Otros candidatos como el expresidente Jaime Paz Zamora, del Partido Demócrata Cristiano (PDC), o el exvicepresidente Víctor Hugo Cárdenas, de Unidad Cívica Solidaridad (UCS) y otros cuatro binomios de oposición aparecen con un apoyo menor.
«Pedí que la derecha se una, no quieren unirse», dijo este miércoles Morales durante un acto de entrega de maquinaria agrícola en la región de Chuquisca.
El jefe de Estado contrapuso la situación de «la derecha» a la posición de las organizaciones de campesinos y trabajadores que lo respaldan que, aseguró, están unidas.
Morales alentó el pasado martes a los sectores de oposición a unirse luego de que el bloque oficialista mostrara su unidad en una concentración que, a juicio del mandatario, congregó el fin de semana a un millón de militantes y seguidores suyos.
El mandatario boliviano se presenta a las elecciones para conseguir su cuarto mandato que lo mantendría en el poder hasta 2025, año del bicentenario de la independencia de Bolivia.
Morales consiguió su habilitación a la reelección indefinida gracias a un fallo del Tribunal Constitucional, en 2017, que consideró que tiene el derecho humano de presentarse y el pueblo de elegirlo en futuros comicios.
Aquella decisión se contrapuso a un referéndum celebrado en 2016 que le negó esa posibilidad.
El Comité Pro Santa Cruz anunció este miércoles que los binomios opositores y dirigentes cívicos nacionales se reunirán el viernes en esa ciudad oriental para evaluar y definir las acciones que realizarán contra la reelección presidencial.
Con información de EFE