Caracas.- La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, fue condenada este martes, 6 de diciembre, a seis años de prisión por irregularidades en la concesión de obras viales durante los gobiernos kirchneristas (2003-2015).
La causa por la concesión de obras públicas en Santa Cruz, conocida como Causa Vialidad, es por lo que condenan a la alta funcionaria. Para la vicepresidenta, la decisión obedece a una estructura de Estado paralelo y a la mafia judicial.
Cristina Fernández adjudica a mafia judicial decisión de seis años de cárcel
Sin embargo, la sentencia sobre Cristina Fernández de Kirchner no es un caso aislado en Latinoamérica. Varios exmandatarios han sido sometidos a medidas similares restrictivas de la libertad o inhabilitaciones. Algunos de los casos más emblemáticos son los de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva; Perú, Alberto Fujimori y Ollanta Humala; de Bolivia, Jeanine Áñez Chávez y de Ecuador, Rafael Correa.
Violaciones a los DDHH
El caso de Alberto Fujimori es uno de los más destacados en la región latinoamericana, pues fue condenado a 25 años de prisión en 2009 por ser el autor indirecto de dos masacres del grupo paramilitar Colina en 1991 y 1992.
Caso Lava Jato – Odebrecth
Por su parte, Lula Da Silva, fue condenado por delitos de corrupción y blanqueo de capitales en dos casos. La justicia de su país comprobó que el exmandatario y líder del Partido de los Trabajadores (PT) recibió un apartamento y aceptó unas mejoras a una vivienda que frecuentaba en el estado de Sao Paulo, que fueron ofrecidos por las constructoras Odebrecht y OAS, a cambio de contratos con la estatal Petrobras.
Da Silva fue condenado a 12 años de cárcel por recibir el apartamento y a 17 años por aceptar las mejoras a la residencia que figura a nombre de su amigo y empresario, Fernando Bittar. El expresidente permaneció en prisión desde abril de 2018 hasta noviembre de 2019.
Lula Da Silva recuperó su libertad al verse beneficiado por una decisión del Tribunal Supremo, que consideró que un condenado no puede cumplir una sentencia hasta que sean agotados todos los recursos judiciales. Pese a este juicio, Lula Da Silva fue electo el pasado mes de noviembre para un nuevo periodo presidencial.
Ollanta Humala, expresidente de Perú, fue recluido de forma preventiva en julio de 2017, en el penal Barbadillo en su país, tras haberse entregado voluntariamente. Humala fue acusado por presunto lavado de activos en detrimento del Estado y de asociación ilícita para delinquir en el caso Lava Jato del Perú, también relacionado con la empresa brasileña Odebrecht.
El 26 de abril de 2018, por resolución del Tribunal Constitucional del Perú, pudo asumir su proceso en libertad. Actualmente es investigado bajo comparecencia restringida.
Mientras, el expresidente ecuatoriano Rafael Correa fue sentenciado en 2020 por participar en una red de sobornos por recibido aportes indebidos para la financiación de su movimiento político, Alianza País, a cambio de la adjudicación de millonarios contratos del Estado a empresas, entre ellas la constructora brasileña Odebrecht.
Desde 2017, Correa reside en Bélgica. En Abril de este año, el gobierno belga otorgó a Correa el estatus de asilado político.
Causas políticas
La expresidenta boliviana Jeanine Áñez fue condenada a comienzos de 2022 a 10 años de prisión, tras ser declarada culpable por los delitos de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución.
Las ilegalidades fueron cometidas al asumir la presidencia interina de Bolivia en 2019, luego de que el ejército obligara a renunciar a Evo Morales, en un hecho considerado por el oficialismo como un «golpe de Estado».
Áñez enfrentó el proceso legal de manera virtual desde la cárcel. De acuerdo con las autoridades, la dirigente representaba un riesgo de fuga, por lo que permanecía detenida.
Tribunal de Argentina condena a Cristina Kirchner a seis años de prisión