Caracas.- La Comisión Europea (CE) aseguró este miércoles que seguirá analizando los acuerdos fiscales entre las empresas y los países miembros de la Unión Europea (UE), para confirmar si constituyen una ayuda de Estado ilegal y agregó que estudiará la sentencia sobre Apple antes de decidir si la recurre.
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Bruselas se pronunció en ese sentido tras la sentencia del Tribunal General de la Unión Europea que este miércoles anuló la decisión del Ejecutivo comunitario, que pidió a Irlanda recuperar 13.000 millones de euros más intereses en impuestos no abonados por la empresa estadounidense Apple a Dublín entre 2003 y 2014.
«La Comisión continuará analizando las medidas de planificación fiscal abusiva bajo las normas de ayudas de Estado de la UE para evaluar si dan lugar a ayudas de Estado ilegales», declaró en un comunicado la vicepresidenta de la CE encargada de Competencia, Margrethe Vestager, quien en 2016 pidió a Irlanda recuperar los 13.000 millones y los intereses.
Añadió que la CE sigue considerando que «todas las empresas deberían pagar su proporción justa de impuestos».
«Si los Estados miembros dan a ciertas multinacionales ventajas fiscales que no están disponibles para sus rivales, esto daña la competencia justa en la UE», afirmó Vestager, quien agregó que esas medidas también «privan» a las arcas públicas y a los ciudadanos de fondos para inversiones «muy necesitadas, cuya necesidad es incluso más aguda en tiempos de crisis».
Aunque la sentencia del Tribunal General de la UE se puede recurrir ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (Tjue), la máxima instancia judicial en el club comunitario, la política danesa no especificó aún si Bruselas presentará el recurso.
«Estudiaremos con cuidado la sentencia y reflexionaremos sobre posibles próximos pasos», se limitó a decir.
El Tribunal General de la Unión Europea anuló este miércoles en una sentencia la decisión de la Comisión Europea que pidió a Irlanda recuperar 13.000 millones de euros más intereses en impuestos no abonados por la empresa estadounidense Apple a Dublín entre 2003 y 2014.
En agosto de 2016, la CE concluyó que dos pactos fiscales concedidos a Apple por Irlanda en 1991 y 2007 le permitieron «reducir sustancialmente y de forma artificial los impuestos» que pagaba, llegando a abonar una tasa efectiva del 0,005% en 2014 aunque el impuesto de sociedades es del 12,5 %.
Sin embargo, la corte comunitaria considera que la Comisión Europea no demostró con la suficiente solidez desde el punto de vista jurídico que Irlanda otorgó una ventaja competitiva a Apple frente a otras compañías mediante los acuerdos fiscales que reducían los impuestos que pagaba la firma de la manzana.