Washington.- Por primera y última vez en la campaña electoral, el aspirante a repetir como vicepresidente de EE. UU., el republicano Mike Pence, y su rival demócrata, Kamala Harris, se midieron en un debate este miércoles, que transcurrió como un cara a cara al uso en un tono civilizado y cuyo protagonismo en las redes sociales acaparó una mosca inoportuna.
Estas son las claves de los principales momentos del encuentro, que se ha celebrado en la Universidad de Utah, en Salt Lake City:
Coronavirus a la sombra de La Rosaleda
Los primeros minutos del debate estuvieron dedicados al COVID-19; ambos aspirantes mostraron las grandes diferencias de criterio sobre el tema que les alejan en términos políticos.
Harris afirmó que si los expertos lo recomiendan se vacunará contra el COVID-19, pero que no lo hará si el presidente Donald Trump lo pide.
«Si el doctor (Anthony) Fauci (el principal epidemiólogo de la Casa Blanca), si los médicos nos dicen que debemos ponérnosla, seré la primera en la cola para ponérmela, absolutamente. Si Donald Trump nos dice que debemos ponérnosla, no lo haré», dijo Harris en el debate frente al vicepresidente, Mike Pence.
Por su parte, Pence defendió su asistencia a un evento hace 11 días en La Rosaleda de la Casa Blanca, que pudo ser el foco de los contagios entre personal de la mansión y el propio presidente.
«Mi mujer Karen y yo estuvimos allí, y estuvimos honrados por estar allí. Mucha gente de quienes estuvieron en el acto, Susan (moderadora), en realidad muchos se hicieron las pruebas de coronavirus, y fue un acto al aire libre, lo que todos nuestros científicos aconsejan habitualmente y rutinariamente», señaló el vicepresidente.
«No me sermonee»
«No voy a sentarme aquí para ser sermoneada por el vicepresidente sobre lo que significa aplicar las leyes de nuestro país», señaló la senadora por California y exfiscal general de ese estado, después de que el republicano dijese que los demócratas «insultan» a las fuerzas de seguridad cuando afirman que existe racismo sistémico en el país.
Pence también calificó de «insulto» a los policías «cuando (Joe) Biden dice que cree que las fuerzas de seguridad son implícitamente parciales contra las minorías».
Pence hace políticas con las víctimas del EI
Uno de los golpes bajos del debate fue cuando Pence aseguró que la Administración de Barack Obama (2009-2017), de la que Biden fue vicepresidente, permitió la expansión del grupo terrorista Estado Islámico (EI), y que los padres de Kayla Mueller, una joven estadounidense asesinada por los yihadistas en Siria en 2015, piensan que estaría viva si Trump hubiera estado a cargo cuando fue secuestrada.
«Si el presidente Donald Trump hubiera sido presidente, ellos creen que Kayla estaría viva hoy», aseguró Pence.
Los padres de la joven, Marsha y Carl Mueller, estaban entre los invitados por Pence al debate en la Universidad de Utah.
La mosca hipnotizante
Una mosca se posó sobre la cabeza de Pence durante dos minutos y tres segundos. De inmediato se convirtió en la reina de la noche en las redes sociales de EE. UU. y en la invitada no deseada del debate.
La mancha oscura el cabello blanco de Pence hipnotizó a los estadounidenses e hizo que se desatara una avalancha de comentarios y memes en Twitter.
Fotografías desde todos los ángulos del insecto se difundieron en la popular red social y hasta el aspirante demócrata a la Casa Blanca, el exvicepresidente Joe Biden, se sumó a la ola, al publicar una imagen suya con un matamoscas en la mano.
«Contribuye con $5 para ayudar a que esta campaña vuele», escribió el demócrata, cuyo equipo aprovechó el momento para publicar un tuit con la imagen de un matamoscas y la leyenda: «Ahuyenta moscas y mentiras».
El ingenio de los seguidores del cara a cara electoral no se quedó atrás y uno de los usuarios de Twitter publicó, en inglés y en español: «¡¡¡Y la ganadora del debate vicepresidencial es… LA MOSCA!!!».