Caracas.- José Luis Zabala fue acusado en 2015 en Andorra por blanqueo masivo de capitales y valores. Según los señalamientos de las autoridades de ese país, ayudó a organizar un sistema de comisiones a los contratos públicos de Pdvsa.
Sus tarjetas de crédito de Zabala parecían no tener límite. Según El País, tenía millonarias cuentas ocultas en Andorra. Sus movimientos bancarios revelan la pasión por la buena vida de este empresario venezolano.
A continuación algunos puntos en clave de los gastos en más de cuatro millones en bienes de lujo que realizó durante años de expolio a Pdvsa:
- En 2009, se gastó 219.468 euros en Ermenegildo Zegna y los bolsos de Louis Vuitton. También pagó 149.900 euros para hacerse en 2010 con un exclusivo ejemplar de oro de una edición limitada de Jaeger-LeCoultre.
- Zabala destinó 646.000 euros solo en 2010 a acumular joyas y relojes. Junto al Jaeger-LeCoultre de casi 150.000 euros, adquirió ese mismo año un IWC de oro rosa por 155.000 euros.
- Según reseña el medio español, un Parmigiani Kalpa de mujer, de oro con brillantes y montado manualmente, con un coste de 18.190 euros, entró también a formar parte de la colección de Zabala.
- Se gastó 126.760 euros en tiendas de este último fabricante ginebrino de relojes de lujo.
- Realizó abonos de 20.800 por unos pendientes de oro de 18 kilates con brillantes; 13.000 euros por un anillo de oro rosado con piedras preciosas y brillantes, y 800 euros por tres bolígrafos Cartier. Además, Zabala desembolsó 27.380 euros en la joyería Wempe de Madrid, detalla El País.
- El corredor de seguros abonó en 2010 un total de 370.000 euros por la obra Psysichromie número 507 del artista franco-venezolano Carlos Cruz-Diez.
- Pagó también 485.000 euros en 2010 por Amantes, una escultura modelada en 1985 en bronce por el colombiano Fernando Botero.
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