Diversas firmas de moda y belleza y grandes conglomerados de lujo se han estado sumando a la lucha contra el coronavirus fabricando geles desinfectantes, mascarillas, guantes y todo tipo de artículos de protección para el personal sanitario. Chanel es una de las últimas en anunciar que también utilizará sus equipos y espacios para producir mascarillas y batas. Además, también donó 1,2 millones de euros a un fondo de emergencia dedicado al sistema de hospitales públicos y se comprometió a mantener el sueldo a sus empleados durante ocho semanas, evitando así poner en marcha un Erte, según publicó el medio WWD.
El pasado viernes 27 de marzo, Francia anunció que extendía el confinamiento hasta el 15 de abril y las tiendas permanecen cerradas desde el pasado 14 de marzo, a excepción de las de primera necesidad. La marca francesa mantiene cerrados todos sus espacios físicos en Europa y Norteamérica, pero se ha comprometido a pagar el salario de sus empleados hasta el 8 de mayo. “El objetivo es evitar poner una carga sobre las finanzas públicas para que el Gobierno francés tenga como prioridad ayudar a las empresas más vulnerables”, explicó Chanel en un comunicado.
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Su iniciativa de cambiar su producción habitual por la de material sanitario se suma a otras como la del grupo Lvmh, conglomerado de lujo al que pertenecen algunas marcas, como Louis Vuitton o Moët, que ha destinado las instalaciones que producen fragancias y cosméticos a fabricar geles desinfectantes de manos para abastecer a los hospitales franceses o a la de Kering (Gucci o Balenciaga) que se ha comprometido a donar tres millones de mascarillas.
Mango, H&M, Inditex o L’Oréal, entre otras muchas marcas y diseñadores independientes, también cambiaron la rutina de sus fábricas para centrar la producción en material útil que ayude a frenar la curva de contagio y proteja a los sanitarios que trabajan sin descanso para garantizar la recuperación de los contagiados.
Con información de El País