Caracas.- El canciller chileno, Alberto van Klaveren, calificó este miércoles, 5 de junio, como inaceptables las declaraciones del fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, quien señaló a cuerpos de inteligencia chilenos y extranjeros como posibles responsables de la muerte del exmilitar Ronald Ojeda.
«Las declaraciones del fiscal general nacional venezolano son inaceptables, pero no nos sorprenden», indicó el canciller en un video enviado a los medios. Van Klaveren aseguró que, pese a las tensiones, el Gobierno chileno no se plantea la ruptura de relaciones diplomáticas con Venezuela y subrayó que la cooperación sería más difícil sin representación en el país.
«Los cursos de acción diplomáticos siempre están en evaluación y agotaremos todas las instancias para aclarar este horrible crimen», añadió el funcionario chileno.
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El fiscal general venezolano, Tarek William Saab, declaró este miércoles que el crimen de Ojeda fue una operación para enturbiar las relaciones entre ambos países y rechazó que los dos sospechosos vayan a ser extraditados a Chile en caso de ser detenidos.
«Lo fundamental es saber qué noticias tienen las autoridades venezolanas sobre los dos ciudadanos de ese país que se encuentran prófugos de la justicia chilena. Esa es la colaboración que estamos exigiendo y es lo mínimo que podemos demandarles», concluyó el canciller Van Klaveren.
Saab cuestionó la falta de reciprocidad por parte de la Fiscalía de Chile para colaborar en el esclarecimiento de la muerte de Ojeda. Señaló que las autoridades chilenas mostraron poco interés durante la visita de la comisión venezolana y no brindaron acceso al expediente ni permitieron conversar con el fiscal a cargo del caso.
El fiscal general también criticó el uso político del caso y planteó preguntas sobre la situación de Ojeda en Chile y la falta de acciones contra uno de los sospechosos con investigaciones abiertas por secuestro. Saab consideró que el homicidio de Ojeda podría ser una operación para enturbiar la relación entre Chile y Venezuela.
“Consideramos que el homicidio de Ojeda se trata de una operación de falsa bandera, una operación que tenía como objetivo enturbiar la relación entre Chile y Venezuela justo cuando ocurría un importantísimo acercamiento. En esta operación pueden haber participado cuerpos de inteligencia de Chile y extranjeros con intereses espurios”, dijo Saab.
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Ronald Ojeda, disidente del gobierno de Nicolás Maduro y asilado político en Chile, fue secuestrado el pasado 21 de febrero en Santiago. Sus restos fueron hallados 10 días después en una toma irregular en una localidad periférica de la capital, sepultados debajo de un bloque de cemento.
El fiscal chileno a cargo del caso, Héctor Barros, vinculó el crimen con la banda criminal Tren de Aragua, nacida en una cárcel venezolana y extendida por Chile, Perú, Colombia y Bolivia. En abril, Barros solicitó apoyo a las autoridades venezolanas para esclarecer los hechos.
La semana pasada, dos fiscales venezolanos visitaron Chile y se reunieron con el director de la Unidad de Cooperación Internacional y Extradiciones de la Fiscalía Nacional chilena (Uciex), Juan Pablo Glasinovic, para colaborar en la investigación.
En abril, el presidente Gabriel Boric llamó a consultas a su embajador en Caracas, Jaime Gazmuri, y ha habido acusaciones de falta de cooperación por parte de Chile hacia Venezuela. Hasta ahora solo hay un joven detenido, pero hay otros dos sospechosos con órdenes de detención que las autoridades chilenas creen que están en Venezuela.
Con información de EFE y Ministerio Público.