Los venezolanos que regresaron al país tras ser deportados por el gobierno de Estados Unidos fueron enviados al hotel Sanitario La Guaira, ubicado en la montaña de La Llanada, de acuerdo con información que obtuvo El Pitazo.
La noche del 10 de febrero llegaron de El Paso, Texas, dos aviones de la empresa nacional Conviasa con 190 migrantes, quienes recibieron la bienvenida de parte del ministro del Interior y Justicia, Diosdado Cabello, en el aeropuerto Simón Bolívar de Maiquetía.
«Hoy día se retoma la iniciativa (del retorno de venezolanos) desde los Estados Unidos. Hace algún tiempo fue necesario suspenderlo por acciones de la administración pasada (la de Joe Biden)«, dijo Cabello.
De acuerdo con información a la que tuvo acceso El Pitazo, los venezolanos que arribaron de Estados Unidos serán chequeados en el hotel Sanitario de La Guaira por la autoridades para conocer si tienen antecedentes penales o si están solicitados. También recibirán asistencia médica para descartar enfermedades infectocontagiosas.
Se reactivó el proceso
Entre 20202 y 2022 se aplicó un proceso parecido en esta sede a los venezolanos que llegaron durante la pandemia de COVID-19. Asimismo, en 2023 a quienes regresaron al país bajo el programa Vuelta a la Patria. En esa ocasión se les preguntó a los retornados por qué migraron, cómo se fueron y qué hicieron en territorio extranjero.
Desde tarde del lunes funcionarios de la policía regional y demás cuerpos del Estado custodian la entrada del hotel Sanitario de La Guaira, donde se espera lleguen cientos de migrantes irregulares que el Gobierno de Donald Trump acordó a enviar a Venezuela.
El hotel Sanitario La Guaira, construido en los años 60, era la sede del Centro de Inclusión Social Armando Reverón, institución abierta en 2010 y adscrita a la Misión Negra Hipólita, que prestaba atención a personas en situación de calle y con dependencia a las drogas. Antes, entre 2005 y 2008, fue centro de servicio de desintoxicación perteneciente a la Alcaldía del Municipio Libertador (Caracas).
En 2020, bajo la administración del gobernador Jorge Luis García Carneiro, este edificio albergó a los venezolanos que regresaron del exterior durante la pandemia de COVID-19.