Caracas.- Los vecinos de la avenida principal de Palo Verde, en el este de Caracas, cuentan más de 120 horas sin luz..
Pese a que el servicio eléctrico fue restituido en las calles más altas de la urbanización de Lomas del Ávila, en la zona que rodea el Centro Comercial Palo Verde y hasta la calle 2 siguen sin luz.
En la comunidad reportan que, a diferencia de zonas cercanas como José Félix Ribas o Las Vegas de Petare, donde el servicio fue restituido de forma intermitente, en la avenida principal de Palo Verde “jamás ha vuelto la luz”.
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Guillermo Rodríguez indicó que no fue sino hasta la noche del lunes cuando funcionarios de Corpoelec acudieron a la zona, luego de que los residentes trancaron la calle para protestar por la situación.
“No llega la luz desde el jueves con el apagón y aquí viven muchos adultos mayores. No tenemos gas ni agua, y nos ha tocado cocinar en la casa de amigos, cargar agua hasta 17 pisos y pedir ayuda a los jóvenes para sobrevivir”, contó Rodríguez, quien vive en las residencias Roma.
Muchos vecinos también tomaron la decisión de mudarse por unos días a casas de familiares, ante la imposibilidad de usar los ascensores en esta comunidad que, casi en su totalidad, está conformada por edificios.
Las fallas en el servicio de luz alcanzaban a Lomas del Ávila, pero tras la visita de Corpoelec, la noche del lunes se restituyó el servicio en gran parte del sector.
Gustavo Perales indicó que los funcionarios prometieron restituir el servicio y trabajar en la subestación de la zona industrial de Palo Verde.
Sin embargo, El Pitazo corroboró que este sitio se encuentra cerrado y un vigilante informó que “desde el lunes a las 5:00 pm aquí nadie viene a trabajar”.
Pérdida de alimentos
La indignación de los vecinos es evidente. Tomás Corrales, residente del Edificio Venezuela, contó que perdió al menos 12 bandejas de carne que había comprado para el mes.
Relató que hizo un recorrido de varias horas para encontrar hielo en Caracas, pero no consiguió.
La mayoría de los establecimientos comerciales permanecen cerrados.
Otros, como el Frigorífico Palo Verde, regalaron pollo y carne a sus clientes, antes que perderla. “Abrimos esperando la luz, pero esto ha sido solo pérdidas, porque no hemos vendido casi nada, por eso decidimos darle a los clientes el pollo y la carne que teníamos, antes de que se dañara”, contó el dueño del local.
La gente que vive en la zona instó a las autoridades a resolver el problema a la brevedad y a tomar en cuenta a la comunidad de adultos mayores que residen allí.