La Guaira.- Vías anegadas, fallas eléctricas en sectores de las parroquias Carayaca, Catia La Mar, La Guaira y Caruao, así como un incremento considerable de los caudales más importantes de la región litoralense, fue el saldo que dejaron las lluvias generadas por el paso de la Onda Tropical 41 por el estado Vargas.
En declaraciones ofrecidas al mediodía de este jueves, el gobernador José Alejandro Terán confirmó vía telefónica a El Pitazo, que ninguna de las cuencas del litoral central se había desbordado; sin embargo, reconoció que los equipos de atención estaban desplegados en el estado atendiendo la falla presentada en los drenajes, que trajo como consecuencia las anegaciones.
Lluvias en Lara: “Los niños lloraban pensando que se iban a ahogar”
«Estamos desplegados en las calles, en constante monitoreo con los órganos de seguridad ciudadana, no tenemos ningún reporte de afectación por desbordamiento de alguna quebrada o río. Para atender las avenidas anegadas se desplegarán cuadrillas de limpieza» explicó el mandatario regional.
Terán detalló que las fallas eléctricas más fuertes se reportaron «en ambos extremos del estado, específicamente en los pueblos de Caruao y el eje costero de Carayaca. Ya contamos con las cuadrillas de Corpoelec para atender las fallas».
Entre las avenidas anegadas por las lluvias destacaron la José María España y Bulevar Naiguatá, en el este de la entidad costera, mientras que hacia el oeste la Bicentenaria, principal de Puerto Viejo y La Armada presentaron inundaciones parciales.
La gobernación y la alcaldía dividieron las zonas afectadas y la maquinaria pesada para atender la problemática que afectó la movilidad de los litoralenses.
Las anegaciones trajeron como consecuencia la suspensión de clases en muchos centros educativos, tras la decisión de las unidades de transporte público de no trabajar hasta que bajara la intensidad de las lluvias y mermara el agua estancada en las calles.
Dragar las cuencas
Vecinos de Macuto y Catia La Mar solicitaron a las autoridades regionales el dragado inmediato de las cuencas de Mamo, Tacagua y El Cojo, por la cantidad de desechos naturales que obstaculiza las cuencas.
«En el río El Cojo, en Macuto, el caudal aumentó arrastrando mucha sedimentación. En la parte alta de la canalización el corredor se encuentra despejado, sin embargo, el problema se agrava en la avenida La Playa, donde un tapón de sedimentos se ubica debajo del puente, por falta de dragado», dice el dirigente Nelson Galvis.
Similar situación viven los comercios y residentes de la calle 8 de la urbanización La Atlántida en Catia La Mar con la cuenca Tacagua, así como los residentes de las zonas Marapa y El Piache con la cuenca de Mamo. «El río Mamo se salió hace como una semana. Aún estamos esperando que vengan las autoridades a limpiar la cuenca. No nos asusta que aumente el caudal, sino que salga y tome la vía principal y las casas», contó Rosa Blanco, vecina de la zona.