Caracas.- Los trabajadores universitarios, acompañados de los gremios de la salud, la educación, el petróleo y empleados de empresas del Estado, se concentraron este viernes 4 de octubre en los alrededores de la Esquina El Chorro, en el centro de Caracas, para reclamar el pago de “salarios iguales a la canasta básica, tal como lo establece el artículo 91 de la Constitución venezolana”.
Por un lapso de tres horas, los empleados públicos y su dirigencia gremial se mantuvieron en las afueras de la sede del Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología y persistieron en su reclamo, aún y cuando un grupo de la fuerza motorizada chavista, que superaba las 150 motos, se paseó por la avenida universidad gritando consignas a favor de Nicolás Maduro, amedrentando y amenazando a los manifestantes.
El grupo de trabajadores estuvo acordonado siempre por un contingente antimotín de la Policía Nacional Bolivariana, que los mantuvo en la acera, y otro de la Guardia Nacional, que cerró las cercanías de la avenida Universidad e impidió que quienes hacían el reclamo se apostaran en la calle, pero abrió solamente para permitir el paso de los oficialistas a bordo de motos.
Ante los hechos, Carlos Salazar, presidente de la Coalición Sindical, exhortó a los funcionarios policiales a cumplir con su deber de proteger a la ciudadanía, garantizando siempre el respeto a los derechos fundamentales, incluido el de manifestar libremente. «Están tan mal como los trabajadores que protestamos… Aquí están los cuerpos represivos. Esto es meramente sindical, laboral y gremial, porque aquí todos estamos pasando hambre«, dijo.
La consigna de los manifestantes se mantuvo centrada en la exigencia de salarios dignos e igualados a la canasta básica que, de acuerdo al último estudio del Cendas, en el mes de agosto se ubicó en Bs. 3.595.488, equivalentes a 175 dólares (tasa oficial). Eduardo Sánchez, presidente de la Federación de Trabajadores Universitarios, explicó que estas fueron las peticiones que consignaron en el despacho del ministro de Educación Superior, César Trómpiz.
El dirigente gremial exigió la renuncia del ministro del Trabajo, Eduardo Piñate, y aseguró que “le quedó grande el cargo”. “Estamos pasando hambre mientras que estos ministros y los enchufados no pasan hambre, porque no viven del salario, sino de la corrupción”, dijo. Sánchez reiteró que la petición es de respeto al derecho de los contratos colectivos ya existentes y aseguró que la manifestación se mantendrá en todo el país de manera pacífica.
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Esta queja fue apoyada por gremios como el de la salud, que en boca de Margot Monasterios, secretaria general del Sindicato de Empleados del Hospital Universitario de Caracas, “procuran dejar de recibir salarios de hambre. “Le exigimos al Gobierno que respete los beneficios de tantos años de lucha porque nosotros vamos a estar en la calle luchando por un sueldo digno, de acuerdo con el artículo 91 de la Constitución”, dijo.
Monasterios aseguró que todos los empleados públicos ganan el sueldo mínimo y le pidió a Nicolás Maduro que considere que “aquí todo se cobra en dólares, pero nosotros cobramos en ese bolívar y que soberano”, acotó la trabajadora.
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