Caracas.- El periodista y dirigente social Carlos Julio Rojas cumplió nueve meses recluido en El Helicoide, tras ser detenido el pasado 15 de abril luego de ser señalado por el fiscal Tarek William Saab como responsable de un presunto intento de magnicidio contra Nicolás Maduro. Sus familiares aseguraron que sigue aislado y sin acceso a sus libros, tampoco tiene derecho a la defensa privada.
Rojas es el coordinador del Frente Norte Caracas, desde donde realizó activismo junto a vecinos de diferentes comunidades del centro de la ciudad. Denunció constantemente la operación de colectivos, especialmente las ocupaciones ilegales que ejercían en comercios y apartamentos. También expuso de forma continua el precario funcionamiento del suministro de agua, recolección de basura y electricidad en la capital del país.
Días antes de ser detenido, participó en la tradicional quema de Judas. Junto a varios vecinos quemó un muñeco de dos cabezas con los rostros de Maduro y del dirigente opositor Manuel Rosales.
Francy Fernández, esposa de Rojas, denunció que en ocasiones no le permiten el ingreso de paquetería con comida y artículos personales. “Que no le reciban sus cosas y que como preso no pueda leer un libro, ya hace que las condiciones sean graves”, dijo.
Fernández, quien ha alzado su voz para exigir la liberación de los presos políticos junto a decenas de madres, esposas, hermanas e hijas, opinó que los detenidos que permanecen en Tocuyito, Tocorón y El Helicoide no son fichas de canje, sino seres humanos.
“Están jugando con la separación de la familia, con su salud física y mental. Carlos Julio es inocente y todos los que están ahí lo saben, que lo sigan teniendo allí sin razón y motivo es muy cruel”, denunció durante la concentración de familiares exigiendo liberación frente al Ministerio Público, que se realizó el jueves 16 de enero.
Espacio Público agradece a quienes alzaron la voz para exigir la liberación de Carlos Correa
Denuncian arbitrariedades
“Es una prisión injusta”, reiteró Eduardo Torres, abogado defensor del periodista que no fue aceptado por el tribunal, ya que le impusieron un defensor público.
“En estos nueve meses al periodista se le ha vulnerado el derecho a la defensa y al debido proceso. Sus abogados de confianza no hemos podido juramentarnos y no se conoce nada acerca de las pruebas de los delitos infundados que le fueron imputados”, indicó Torres, quien también señaló que se le ha suspendido la visita “de manera irregular”.
El abogado aseguró que los familiares de Rojas “sufrieron amedrentamiento y hostigamiento por exigir que mejoren las condiciones de reclusión y que sea liberado”.
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR
- Familiares de presos políticos rechazan condiciones inhumanas en cárceles: lo que sigue es la muerte