Caracas.– Los restos del militar venezolano Domingo Antonio Sifontes serán recibidos en el Panteón Nacional este 9 de enero de 2024. El gobierno de Maduro destacó su labor al expulsar a tropas inglesas del Esequibo durante la época colonial.
Sifontes nació en Cantaura, estado Anzoátegui, en 1834 y falleció el 9 de enero de 1912 en Tumeremo, estado Bolívar, donde vivió gran parte de su vida. Fue apodado el “terror de los ingleses”.
El 6 de enero se realizó la exhumación de sus restos para ser trasladados desde Tumeremo, en el estado Bolívar, hasta el Panteón Nacional, en Caracas. El anuncio fue realizado por Nicolás Maduro el 5 de enero en su cuenta de la red social X.
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Los restos iniciaron un recorrido en ciudades que tuvieron significado en su vida, antes de ser trasladados a Caracas, para que le rindieran honores. En la programación, que tuvo una duración de cuatro días, también hicieron una caravana hasta El Callao y después a Ciudad Bolívar. El 7 de enero llegaron a Cantaura y luego seguían al estado Miranda, para recibir honores en la plaza Bolívar.
El 8 de enero, se le rendirá honor en la capilla ardiente de la Academia Militar del Ejército Nacional y el 9 de enero finaliza el recorrido de sus restos con la llegada a la Asamblea Nacional y su ingreso al Panteón Nacional. Este día se cumplen 112 años de su muerte.
¿Quién fue Sifontes?
El general Sifontes se dedicó a actividades agrícolas y militares hasta ocupar el cargo de comisario general del Cuyuní y sus afluentes. En 1884 fue fundador de El Dorado, en medio de una invasión en el Esequibo.
El Gobierno precisó que, el 2 de enero de 1895, Sifontes impidió que un grupo de británicos tomara el control de El Callao, Upata, Tumeremo y El Dorado, cuando ocupaba el cargo de comisario entre los ríos Yuruari y Cuyuní.
Un grupo de ingleses llegó desde Guyana, después de atravesar el río, izó sus banderas y fue enfrentado por el general Domingo Antonio Sifontes y, posteriormente, llevado a la comisaría de Cuyuní. En esta época buscaban ocupar estas tierras para sustraer minerales.
Historiadores precisaron que después de este incidente en Cuyuní, se dedicó a la exploración de la zona, protección de los aborígenes que residían en esa tierra y el cuidado de la comisaría entre los ríos.