Después de casi tres años de una larga y dura pelea, vecinos de El Junquito y sus alrededores comienzan a recibir paulatinamente el suministro de agua, gracias a que fue instalada una bomba hidráulica para el bombeo del vital líquido, de acuerdo a la información aportada por la diputada de la Asamblea Nacional Marialbert Barrios.
La parlamentaria detalló que, para que los vecinos de la parroquia capitalina no tengan problemas de agua, deberían estar funcionado adecuadamente las plantas de bombeo de Vista Alegre, Mamera, Canaima, Luis Hurtado e Himalaya. «En este momento podemos afirmar que la más importante fue reparada, mas no ha sido solventado del todo el problema, ya que es necesario poner repuesto en la planta de Mamera, ser vigilantes de la planta de Canaima, Luis Hurtado e Himalaya, porque el problema es sistemático debido a la falta de mantenimiento«, dijo.
Recordó que desde agosto del 2017, «recibimos infinitas denuncias por la falta del suministro de agua. Elevamos la alerta en 2018, cuando el caso se agravó por distintos deslizamientos de tierra que se dieron en los sectores y los vecinos aseguraron que se debía a los innumerables botes de agua que no eran atendidos por Hidrocapital. Las denuncias y reclamos no cesaron».
Explicó que en enero de 2018, fue contactado un equipo de la empresa estadal de agua, cuyos técnicos que la falta del servicio no se debía a los botes agua, sino a piezas que faltaban en las plantas donde se encontraban las bombas hidráulicas y claramente, la falta de mantenimiento. «Por ello, nos dimos a la tarea de hacerle seguimiento al caso, acompañando en todo momento a los vecinos sin politizar de ninguna manera el problema, pese a que hubo funcionarios que lo intentaron».
La parlamentaria indicó que el proceso fue largo y tedioso. «Demoraron un año y un mes para sustituir una de las piezas de la bomba hidráulica de Vista Alegre. Nos complace que a los vecinos que han permanecido hasta un año sin recibir el vital líquido hoy por sus grifos no les salga solo aire, pero dejamos claro que la bomba está en período de prueba.
Precisó que «el acceso al agua es un derecho humano, establecido en la resolución 64/692 de la Asamblea General de las Naciones Unidas el 28 de julio del 2010. Demostramos una vez más que trabajando juntos y unidos por resolver los problemas de nuestras comunidades, alcanzamos buenos resultados».