Caracas.- El joven Luiggi Medrano, de 23 años, denunció que fue despedido el pasado 3 de enero del restaurante Poke 212 ubicado en Los Palos Grandes, Caracas, por su identidad de género pues asegura que no hay causa justificada. El establecimiento alega que la decisión obedece a incumplimiento de normas por parte del joven.
Medrano fue contratado el pasado 29 de diciembre para ocupar el cargo de anfitrión por tres meses en Poke 212, donde le aseguraron que respetarían su identidad sexual, según contó a El Pitazo. Señaló que sus primeras jornadas laborales se desarrollaron sin novedad, pero aseguró que la gerente general mostró señales de disgusto por su identidad sexual. “Cuando me conoció me pedía hacer cambios en mi apariencia para que me viera más femenina”, relató.
“Cuando le caes mal a alguien no hay nada que hacer. Es una decisión tomada de la gerencia”, fueron las palabras que, según contó, recibió de Recursos Humanos cuando fue informado de su despido, del que no dejaron constancia por escrito ni se le pidió que firmara documento.
Uno de sus abogados, Thomas Velásquez, explicó que la denuncia se interpuso ante la Defensoría del Pueblo y la Inspectoría del Trabajo y el Ministerio Público. Asimismo, detalló que los delitos que denuncian están establecidos en la Ley contra la Discriminación, debido a la identidad sexual. Dijo que además el restaurante violó el decreto presidencial de inamovilidad laboral vigente y causó daños y perjuicios a Luiggi Medrano.
“Haber despedido a una persona por su inclinación sexual tiene sus sanciones desde el punto de vista administrativo, laboral y penal”, señaló a El Pitazo. Finalmente, indicó que las indemnizaciones y otras consecuencias de esta demanda se conocerán a medida que avance el proceso laboral, penal y civil.
La versión de Poke 212
El gerente de operaciones de Poke 212, Dimas Suniaga, dijo que en cinco días que Medrano trabajó en el restaurante llegó tarde un día y faltó otro, hechos que el joven reconoció. Según Suniaga, esas y otras faltas relacionadas con el uso correcto del uniforme e invitaciones que incomodaron a sus compañeras de trabajo fueron las causas de despido, las cuales, aseguró, le fueron comunicadas por el departamento de Recursos Humanos.
“No tenemos problemas con la comunidad LGBTQ. Él (Medrano) fue muy bien recibido (…) Si tuviéramos algún problema con su identidad de género no lo hubiéramos contratado”, aseguró a El Pitazo.
Con relación al trato discriminatorio que Medrano denuncia de una de las gerentes del local, Suniaga asegura que se trata de una percepción y que la gerente a la que hace mención solo cumplió con sus obligaciones de velar por el cumplimiento de las normas establecidas en el restaurante.
Hasta la tarde de este domingo, 9 de enero, el gerente de operaciones de Poke 212 todavía no tenía conocimiento del contenido de la denuncia ni había recibido notificación, por lo que se encontraba a la espera para realizar las acciones pertinentes.