Caracas.- La emprendedora Noelia Montes se siente deprimida y frustrada en víspera de la Navidad porque solo faltan tres días para celebrar esta festividad y aún no ha logrado comprar los estrenos y los juguetes del Niño Jesús de sus seis hijos.
Los hijos de Montes tienen 4, 5, 6, 11, 13 y 17 años de edad y diariamente se enfrenta a una realidad dura: “Les doy de comer o los visto”.
Su preocupación más grande radica en tres de sus pequeños porque su papá dejó de velar por ellos y desde hace más de un año no les da para la manutención, vestimenta o la recreación. Algo que no sucede con los otros tres, a quienes sus padres ya les compraron dos mudas de ropa y zapatos.
“Este año ha sido superpesado y fuerte para mí”, comenta la madre mientras intenta terminar unos lazos y cintillos que le han encargado en los últimos días.
La ansiedad de Montes se incrementa mientras se acercan las fechas, y para tratar de rendir lo poco que percibe ha decidido salir a caminar en busca de ofertas.
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“Me esfuerzo, camino como loca, pero es muy difícil”, dice con cansancio, porque anoche solo pudo dormir unas cuatros horas porque quise terminar los trabajos pendientes.
“Lo único que les he podido comprar fueron los zapatos, un par cada uno, dos bermudas, tres camisas, una braga y una camisa para la niña”, dice Montes mientras contabiliza los artículos con los que cuenta para estas fechas.
“Lo cierto es que este domingo no creo que consigan regalos en el árbol ni ropa nueva”, narra Montes al referirse al presente de esos niños, porque los padres de los otros tres ya les compraron la ropa y los juguetes a sus pequeños.
La Encuesta Nacional sobre Condiciones de Vida (Encovi) de 2022, realizada por la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), reveló que 44 % de la población venezolana se dedica a trabajar por cuenta propia, y así pueden generar 142,3 dólares al mes.
Un salario que no cubre sus gastos
Otra de las madres que se encuentra en aprietos es la caraqueña Betsaida Ordóñez, quien solo ha logrado comprar dos pares de zapatos y un pantalón para sus hijas, de 6 y 17 años.
Pero lo que más lamenta es que el salario que percibe no le cubre este tipo de gastos porque, aunque trabaja en una institución privada, cobra un sueldo mínimo de 130 bolívares más una bonificación de 70 dólares a final de mes, algo que no incide en sus prestaciones sociales. De ese monto tiene que comprar comida para los próximos días.
Los gremios de diferentes sectores del país reclaman, desde hace varios meses, un nuevo aumento salarial, puesto que el último incremento fue realizado hace 643 días, específicamente el 15 de marzo de 2022, cuando se ubicó en 130 bolívares, lo que para la fecha representaba 30 dólares y en la actualidad equivale a 3,63 divisas norteamericanas.
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“Esos zapatos los tengo porque los compré en noviembre”, dice Ordóñez. Su próximo pago caerá a finales de mes, así que será muy tarde para completar los estrenos de este domingo, 24 de diciembre.

Reconoce que ante ese escenario a sus niñas les tocará usar alguna de las prendas viejas, pero que se encuentren conservadas o con poco uso. Sin embargo, confía en que de aquí al domingo pueda comprarles algo más.
El informe de la Encovi 2022 también revela que las remuneraciones promedio en dólares al mes de los trabajadores de la empresa privada se ubica en 149,8 dólares, mientras que los empleados públicos perciben unos 113,3 dólares.
Para el mes de noviembre de 2023, la Canasta Alimentaria Básica se contabilizó en 522 dólares, según el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas). Este organismo indicó que el poder adquisitivo del salario mínimo es de 0,7 %.
Compras tempranas y con financiamiento
El comerciante Alberto Marrero se siente tranquilo y es que las compras de la temporada decembrina fue una de las cosas que decidió adelantar desde el mes de julio.
“Caminando por el Sambil me di cuenta de que habían descuentos en la mercancía de Balú y compre las primeras piezas de estos estrenos, que fueron dos pantalones, dos camisas y una sudadera. Todo eso por 25 dólares y, además, pagué con Cashea”, comenta Marrero mientras camina con sus dos hijos por Sabana Grande.
Cashea es una aplicación de financiamiento en el país que permite llevarte un artículo cancelando solo 50 %, mientras que el restante se debe pagar en tres cuotas cada 15 días.
“La mayoría de las cosas las compré con Cashea y mientras me iban saliendo ventas me ponía al día con las deudas. Antes de noviembre ya tenía todas sus estrenos”, explicó Marrero.
Algunas tiendas en centros comerciales y tiendas departamentales han aplicado descuentos en ropa e incluso hasta juguetes. Estas promociones y descuentos se han mantenido hasta las últimas fechas de diciembre.