Caracas.- Los centros de reclusión preventivos de Caracas se han convertido en verdaderos espacios de extorsión, tortura y diversas violaciones a los derechos humanos de los reclusos.
Un trabajo publicado por TalCual puso en evidencia las carencias que existen y las condiciones inhumanas en las que se mantiene a los reclusos en los 30 centros de reclusión preventivos que hay en la capital del país.
Aunque en los calabozos las personas no deberían pasar más de 48 horas, esta norma no se cumple y la estadía, caracterizada por tratos inhumanos, puede prolongarse a lo largo del tiempo.
A continuación algunos de los puntos expuestos por TalCual en el trabajo de investigación.
1.- El «Centro de Coordinación Policial de la Policía Nacional Bolivariana de Boleíta», conocido como la «Zona 7», está compuesto por 16 celdas y dos calabozos llamados ‘Kingkong’ y el ‘Inframundo’. Los reos los comparan con el cielo y el infierno.
2.- Debido al poco espacio que hay en estos centros de reclusión, los detenidos están hacinados. En muchos de los casos deben permanecer de pie.
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3.- Dado el desespero por salir y las fallas en los procedimientos y traslados, los reclusos cancelan a los funcionarios y policías sumas en dólares para que aceleren sus causas o los trasladen a calabozos con condiciones un poco más dignas.
4.- Las celdas son un riesgo para la salud de los reclusos. En la Zona 7 un reo denunció a TalCual que uno de sus compañeros murió apenas llegar con una fiebre que incluso le volteó los ojos. Dijo que la enfermedad la contrajo en el centro preventivo.
5.- Hasta 10 dólares pueden llegar a cobrar los policías para acceder a trasladar a un reo desde el Inframundo de la Zona 7 hasta alguna otra celda que esté en mejores condiciones.
6.- En el informe presentado en julio al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, la Oficina de la Alta Comisionada de la ONU para los DDHH —que encabeza Michelle Bachelet— se denunció que los centros de detención preventivos no cumplen con las exigencias mínimas de trato humanitario.
7.- Dentro de la Zona 7 hay reglas de convivencia que los internos deben cumplir. Si no lo hacen son castigados y algunos de estos castigos se caracterizan por golpizas y puñaladas.
8.- En lo que va de 2019, ocho presos han sido asesinados dentro de la Zona 7 y uno murió por un abceso en la garganta.
9.- En el caso de la Zona 7, los reclusos deben pagar para obtener beneficios: agua, una colchoneta, visitas conyugales. Hay cuatro reos que se encargan de hacer las cobranzas.
10.- En los centros de reclusión preventivo los funcionarios hacen uso de la tortura como mecanismo de castigo en caso de que el detenido cometa alguna falta.
Lea el trabajo completo aquí: TalCual