Caracas.- Vender sándwiches de pernil en el zoológico El Pinar, en El Paraíso, fue la forma en que la caraqueña Johana Martínez consiguió rebuscarse para ganar dinero extra de forma rápida y hasta sencilla durante el lunes y martes de Carnaval.
“Me enteré de que había una feria para venta de comida y aproveché para ganar dinero en estos carnavales”, dijo la profesora de una academia de baile.
Vendió los panes con vegetales, pernil y salsas a un precio equivalente a dos dólares y la demanda fue tan grande que salió de toda la mercancía antes de que terminara el día.
“Fue increíble, vendimos todo, los clientes pedían de ocho, siete y cinco panes. Nos tenían abollados”, comentó Martínez.
Caraqueños se irán a Punto Fijo, Playa Seca en Carnaval
La venta de comida de Martínez fue apoyada por su esposo, su madre y su hija, quienes se encargaron de calentar el pernil, cobrar y servir.
Así como Martínez vendió sándwiches en el zoológico, otros comerciantes aprovecharon el asueto de Carnaval y comercializaron los productos de temporada, espuma, papelillo, pelucas y máscaras de personajes.
“Estoy vendiendo papelillo en 10 bolívares y la verdad es que a los niños les gusta”, dijo el comerciante Nando Marchena en el bulevar de Catia.
Robert Sabala, por su parte, ofrecía espuma en cinco dólares. “Ya que no hay plata para viajar, me puse a vender estas espumas que los chamos buscan bastante para jugar carnaval”, contó.
Sabala aseguró que cada día sale a buscar la forma de llevar dinero a su hogar, porque tiene tres hijos que alimentar.
La madre hatillana Marcela Ruarte se quejó porque algunos comerciantes abusan durante las festividades y suben los precios de los juguetes luminosos, burbujas, pelotas y otros artículos llamativos para los niños.
Caracas | Madre de niño: es exagerado el aumento del 100 % en precio de disfraces
“En diciembre compramos un jabón de burbujas por 1 dólar en Los Próceres; en El Hatillo costaba 4 y obvio, no se los compré porque se pasan”, señaló Ruarte.
El bulevar del oeste de la ciudad caraqueña contó con muchos buhoneros que no solo vendieron artículos propios del Carnaval, sino atuendos: pantalones, franelas y cholas.
En paralelo, comerciantes ya se preparan para despedir el Carnaval y celebrar el Día de los Enamorados. Para ello, disponen de decoraciones con corazones y arreglos florales, cuyos precios se ajustan a los diferentes bolsillos: entre 1 y 40 dólares, según el tamaño y los artículos que tengan o solicite el cliente.