Caracas.- Dos días visitando la sede de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) en San Bernardino tiene la usuaria Silvia Rojas, debido a un correo de cobranzas de la compañía eléctrica en el cual le dan 72 horas para ponerse al día con su deuda, aunque ella se registró en el plan Borrón y Cuenta Nueva en octubre de 2023.
“En Semana Santa me hacen mi recordatorio de pago, pero por 1.000 bolívares, algo que no entiendo, porque esa es la multa para la gente que no se ha registrado”, narra Rojas en la cola para formular su reclamo.
Toda esta situación la hace sentirse burlada y estafada porque después de cumplir con este trámite le cargan 1.000 bolívares, unos 27,56 dólares calculados a la tasa oficial del 2 de abril. “Aquí había gente ayer que tenía 4 números de contrato y 4 cobros de 1.000 bolívares”, cuenta.
“Después de que lo pusieron a uno a dar carreras para registrarse, ahora le dicen que tiene que venir corriendo a pagar 1.000 bolívares”, relata otra usuaria mientras se queja de las más de 5 horas que tiene en cola.
Corpoelec amenaza con corte de servicio a usuarios de Borrón y Cuenta Nueva
Un sistema con errores e inconsistencias
Rojas recuerda que el lunes, en su primera visita a la compañía eléctrica, le explicaron que ese mensaje le llegó debido a un error e inconsistencia en el registro y la solución fue retirarle ese número de contrato para asignarle uno nuevo.
Esta información fue confirmada por otros funcionarios de Corpoelec a El Pitazo, quienes señalaron que los números de contrato con Ñ, L, K o algún carácter especial, como “.”, “-”, “/”, forman parte de una incidencia, y por esa razón es que han recibido ese tipo de correos. Asimismo, invitó a los usuarios a no cancelar tal monto y esperar a que el sistema haga las correcciones pertinentes.
“El sistema que está vuelto loco”, explicó otro funcionario a las personas que le consultaron y recalcó que aún no se ha facturado.
Sin embargo, el crearle un nuevo contrato a Rojas, le trajo un problema más grande y es que ahora por registrarse fuera del plazo le están cobrando los 1.000 bolívares que establece la multa del plan Borrón y Cuenta Nueva.
“Para ella (…) no existía ese número, porque si la cuenta no estaba registrada, no entiendo por qué me suspendió … Me pones un número nuevo por inconsistencia en la cuenta y decisión unilateral de ellos -Corpoelec-”, señala la cliente.
Lo que más lamenta Rojas es aparecer morosa justo cuando se ha esforzado por mantener al día el pago de los servicios y no caer en este tipo de situaciones que considera vergonzosas.
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Rabia e impotencia por el cobro errado
Este mensaje de “Aviso de Suspensión del Servicio” hizo que la caraqueña Mary Reinoza sintiera rabia e impotencia porque ya había cumplido con el registro en el plan Borrón y Cuenta Nueva.
“No está en manos de uno arreglarlo, sino que depende de Corpoelec y, aparte de eso, te acercas a la sede y te dan cualquier información porque el señor (funcionario) me dijo ‘venga mañana’. O sea, tengo que venir otro día a hacer esta misma cola”, narra Reinoza.
Esta cliente destacó que no tiene sentido hacer un trámite vía internet para luego asistir personalmente hasta alguna sede de Corpoelec a hacer el reclamo
“Supuestamente, está digitalizado, pero no está funcionando porque la mayoría de las personas que está aquí es porque le ha llegado el mensaje”, sentencia mientras espera que algún funcionario le responda a su reclamo.
“Qué despelote es este”, “A mi sobrina le están cobrando 1.000 bolívares”, “Aquí hacen todo mal”, “Esta vaina es una locura”, “Me van a cortar el servicio pagado”, son otras de las expresiones que comparten los clientes de la compañía eléctrica.
Amenazados
Lo que algunos usuarios cuestionan es el tomo amenazante que usan para cobrarles y fue la principal razón para que el cliente Adalberto Febres viajará desde Barinas hasta Caracas a resolver, pero cuando llegó a la cola un funcionario de la Guardia Nacional Bolivariana le informó que no podía hacer la fila porque habían recogido las cédulas de las personas que atenderían ese día.
“Me sentí muy deprimido y me vine ayer por esto”, dice mientras señala los más de cinco correos que tiene en sus manos porque se dio a la tarea de imprimirlos para entregarlos como prueba al funcionario de Corpoelec que lo atienda.
“Uno se siente amenazado, un ciudadano impotente y desprotegido, ante un Estado todopoderoso”, añade.
Finalmente, le recomendó a Corpoelec más seriedad con este proceso, que brinde canales informativos oportunos y mejore la plataforma porque no funciona de forma correcta.