Caracas.- Rubén Blades aprovechó la tarima para criticar a Nicolás Maduro. El poeta, escritor y cantante dijo la noche del viernes 3 de diciembre, en una presentación en el EagleBank Arena de Washington D. C., que el mandatario venezolano «no es un socialista, es un sinvergüenza». Un día antes, en la parada que hizo su gira Salswing para cantar en Nueva York, también fustigó al dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv). El público, en su mayoría de origen latino, aplaudió al panameño y colgó videos en las redes sociales.
El discurso de Blades, figura destacada en la cultura latinoamericana, giró en torno a los gobiernos de Venezuela, Cuba y Nicaragua, a los que calificó de dictatoriales. Recordó el episodio cuando Maduro lo criticó por su postura a favor de los manifestantes durante las protestas de 2017 en Venezuela, que dejaron decenas de muertos y heridos, así como centenas de detenidos. «Yo no busqué ese asunto», dijo en referencia al impase con Maduro, a quien se refirió como «el señor que habla con los pajaritos».
Blades lanzó ante la audiencia unas palabras que siguen retumbando en las redes sociales. «Tenemos la esperanza de que la dictadura en Venezuela desaparezca. Acuérdense de una cosa: Maduro no es un socialista, es un sinvergüenza, que es (algo) distinto», comentó en el concierto del viernes en Washington D. C.
Blades cuenta con una carrera artística que abarca cinco décadas. Se inició como cantante y compositor en 1970 para el sello Fania. Desde 1977 hasta 1982 hizo dupla con Willie Colón, con quien pudo soltar más su pluma para tocar temas de la problemática latinoamericana. Abogado y también actor de cine, el poeta recordó esos pasajes de su carrera para destacar que siempre ha cantado en contra de la injusticia, «venga de donde venga».
«Yo denuncio a la dictadura en Cuba sin ningún miedo. Lo mismo en el caso de Venezuela, sin ningún problema. También en el caso de Nicaragua. Al sandinismo lo defendí cuando atacó a (Anastasio) Somoza. Ahora Daniel Ortega se ha convertido en otro dictador», apuntó. Estas fueron las palabras previas para cantar Tiburón, el tema con el que criticó al sistema de Estados Unidos a inicios de los años ochenta.
Como en la mayoría de sus conciertos, Blades lanzó un mensaje sencillo y poderoso a los latinoamericanos. «Creo en las repuestas civiles. Hay problemas de corrupción en América latina que no fueron creados por Estados Unidos ni por Fidel ni, lo creo, Chávez. Lo creamos nosotros por permitir y votar por gente corrupta. Nosotros tenemos la culpa de que esté esa gente ahí. Así que pongamos de nuestra parte», dijo el también abogado a la audiencia. «El poder no corrompe, el poder desenmascara», afirmó.