Caracas. “Échenle bolas, muestren las actas para que brille lo verdadero”, dice la gaita protesta que compuso el zuliano Alejandro “Nano” Silva. Esto en respaldo al llamado que hace la líder de oposición María Corina Machado para potenciar su mensaje centrado, principalmente, en el reconocimiento de Edmundo González como ganador de las elecciones de Venezuela del pasado 28 de julio y el llamado al Consejo Nacional Electoral (CNE) a publicar las actas de las mesas por centro electoral.
En una entrevista con el director de El Pitazo, César Batiz, el compositor contó la historia de la canción que compuso y que fue inspirada por la frase que ha utilizado Machado en alocuciones después de las elecciones: echarle bolas. Silva pertenece a la segunda generación de gaiteros de la agrupación Barrio Obrero de Cabimas, una de las más icónicas en el género por su canto particular y contestatario.
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“Échenle bolas”, a su juicio, es una de las primeras gaitas que se inspira en una frase que ha dicho un líder político y rompe un poco con el esquema de la gaita protesta con el que usualmente se exteriorizan las calamidades que vive a diario un pueblo, aunque sí expresa el clamor y la inconformidad con los gobernantes.
Esta vez se usa la gaita protesta para hacer coro al mensaje que hace la oposición venezolana a Nicolás Maduro y al órgano electoral, una petición que respaldan al menos 22 países y la Unión Europea, para la inmediata publicación de las actas originales de las elecciones y la verificación imparcial e independiente de los comicios en los que el CNE dio como ganador a Nicolás Maduro.
¿Cómo surgió Échenle bolas?
Nano Silva tiene las herramientas y la creatividad, pero esta vez recibió un empujón de su amigo el cineasta venezolano Emiliano Faría, quien le propuso que debería hacer una gaita protesta con este término de echarle bolas, que es utilizado con frecuencia en Venezuela.
“‘Échenle bolas’ fue una gaita que no nació de mí, que estoy pendiente de las noticias en Venezuela. Mi amigo Emiliano Faria me llamó para hacer una canción con este título basado en lo que había dicho María Corina Machado”, agregó durante la entrevista.
También reveló que la líder de oposición está conmovida con la gaita, de la que no recibió beneficio económico alguno y que espera una llamada para hablar con ella en los próximos días sobre la composición que sintetiza el sentir de decenas de venezolanos.
“Es una frase de ella y esto ha sido todo una simbología que el pueblo lo ha captado de una manera tan impactante y tan positiva que ya las actas son mucho más. Es ese impedimento que no logró que el gobierno pudiera nuevamente hacer un fraude, es la piedra de tranca”, añadió Silva.
La gaita tiene una letra con narrativa contundente que busca demandar transparencia, respeto por la soberanía y la democracia en el país con un estribillo repetido y versos estructurados que repiten el mensaje que exigen los venezolanos: “muestren las actas”.
Presión por ideología política
Silva reiteró que la letra busca transmitir su admiración por el pueblo venezolano, también para inspirarlos a seguir luchando después de 25 años. Ser protestatario lo llevó a migrar a Estados Unidos, al igual que decenas de venezolanos, ya que era director de Barrio Obrero, una agrupación que destaca por sus cantos a la virgen y la gaita protesta como Un ojo dimos, ¿Dónde queda eso? o La revolución.
Sobre su decisión de migrar agrega que estuvo ligada a amenazas y persecución por su inclinación política. Además, sostiene que a la gaita protesta se le cerraron oportunidades en Venezuela.
“Yo estaba muy asociado a la oposición y recibimos muchos ataques. No solo yo, sino también mi familia”, estas fueron algunas de las experiencias que vivió en el año 2014 cuando preparó su salida del país.
La gaita protesta es un recordatorio firme para los gobernantes que tienen renuencia a recibir críticas, y al pueblo, que vive calamidades por la crisis que atraviesa el país.
“Desde aquí siento que estamos haciendo lo correcto, que estamos enviando un mensaje de libertad”, comentó el cantante y compositor zuliano, quien precisó que no ha recibido amenazas o ataques de adeptos al Gobierno por la autoría de esta pieza.
La gaita de protesta ha dejado de producirse en Venezuela y en las emisoras de radio le han cerrado las puertas a este género musical, ya que hace críticas al Gobierno y cuestiona la falta de acción ante problemas que vive el pueblo. A través de sus censores como Conatel ha ordenado cierres de estaciones radiales.
En El Pitazo en 2018 y 2019 se produjeron dos gaitas protesta que reflejaron las consecuencias de años de corrupción y mala gestión, que han llevado a los venezolanos, y en especial a los zulianos, a sufrir noches eternas de oscuridad y calor.
Echarle bolas y Nano Silva
Silva reside en Katy, una ciudad de Texas con gran presencia de venezolanos, y tiene un programa que se llama Sentir zuliano, junto al gaitero Ricardo Cepeda, cada viernes a las 11:00 am a través de la emisora Radio Caribe.
Su amor por la música trasciende y comenzó a colaborar con varios gaiteros hasta que en el año 2018 comenzó Gaiteando con Nano, en el que están varios de sus hijos y familiares siendo exponentes del género tradicional navideño de uno de los estados más poblados de Venezuela, Zulia.
“Comenzamos haciendo gaita protesta que incluso lo llevó a una citación en una fiscalía por Gaita bolivariana, como una crítica a Chávez solo mancillar el nombre del Libertador”, precisó.
Agregó que aunque atribuyó la autoría intelectual a María Corina Machado por el uso de la frase en este contexto postelectoral, pero que esto es un venezolanismo. Echarle bolas o échale bolas es una frase que define cuando las cosas se hacen con entusiasmo, motivación o hay esfuerzo para lograr una meta.
Este es un término que no es frecuente en otros países y tuvo su origen en Caracas, entre los años 40 y 50, según una revista que se publicó en 1967 en honor a los 400 años de fundación de la ciudad de Caracas, era usado por obreros en construcciones.
Los vecinos que presenciaban esto como la demolición de viviendas con una pesada bola que llevaba la maquinaria, en este caso una grúa de bola de demolición, por lo que los trabajadores decían «échale bola» en referencia a seguir golpeando para derribar la estructura previa a la remodelación que seguía en pie pese a los intentos.
El término se popularizó en la época y se extendió por toda Venezuela, donde los coterráneos lo repiten, masifican y pasan a otras generaciones, y ahora queda inmortalizado también en una gaita.
Nano Silva finalizó la entrevista cantando el estribillo de esta gaita que se populariza entre los venezolanos y revelando que pronto tendrá un tema nuevo llamado El soberano.
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