Los líderes de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) condenaron la guerra en Ucrania en la declaración final de la cumbre celebrada en Bruselas. Esto, sin el apoyo de Nicaragua, pero sí con el de Venezuela y Cuba.
«Esta declaración ha sido respaldada por el conjunto de los países, con la excepción de uno, que no ha podido suscribirlo debido a un párrafo», declaró el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en la rueda de prensa posterior a la cumbre este martes, 18 de julio.
La condena de la guerra en Ucrania ha marcado las negociaciones durante toda la cumbre, ya que la UE ha insistido en censurarla. Nicaragua, Cuba y Venezuela se oponían a ello.
«Discutimos mucho, por supuesto, el hecho de que todos quieren que esta guerra termine y que la paz debe ser duradera y centrada en la Carta de la ONU», señaló la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen.
A medida que fueron avanzando las negociaciones, La Habana y Caracas aceptaron una condena explícita a la invasión rusa de Ucrania. Nicaragua se quedó sola en su rechazo, tal como ya ha hecho en la Asamblea General de la ONU, votando en contra de las resoluciones.