Un tribunal boliviano declaró este viernes en «rebeldía» al expresidente de Bolivia Evo Morales (2006-2019), quien por segunda vez no se presentó a la audiencia que debía resolver la acusación por trata agravada de personas en su contra, por supuestamente mantener una relación con una menor con la que habría tenido un hijo.
El juez Nelson Rocabado también estableció que se debe aplicar al exmandatario un «arraigo nacional», darle una notificación por edicto de la resolución, la emisión de un mandamiento de aprehensión, la anotación preventiva de bienes y la congelación de sus cuentas.
La determinación se dio después de que el juez consideró que el argumento que expuso la defensa de Morales de que no pudo asistir debido a que sufre una bronco neumonía y una bradicardia (frecuencia cardíaca baja), «no son elementos legítimos» para no haberse presentado a la audiencia.
Previo a la resolución, el juez denegó una recusación que planteó la defensa de Morales bajo el argumento de que la autoridad judicial habría actuado con falta de imparcialidad en el proceso.
El abogado del exmandatario, Jorge Pérez, declaró que el proceso es «ilegal» ya que Morales «nunca» fue notificado, además afirmó que las autoridades judiciales cometen «prevaricato» al procesarlo por segunda vez en un mismo caso que, consideró, ya fue resuelto años atrás.