Los bancos tienen la obligación de mantener una parte de sus depósitos en el Banco Central con el fin de garantizar que estos cuenten con los fondos necesarios para satisfacer las necesidades de sus depositantes ante una caída en la liquidez. Estas reservas se denominan encaje legal y son un instrumento de control monetario con el que se regula la cantidad de dinero que circula en el país.
Con esta herramienta, la autoridad monetaria también controla los créditos que otorga la banca en relación con los depósitos que recibe y restringe la oferta de liquidez monetaria para contener la inflación.
Mientras más alto sea el encaje legal menor es la cantidad de recursos que la banca puede destinar a préstamos y retiros de fondos de los clientes, lo que se traduce en reducción de la liquidez monetaria.
Resumen | Estos fueron los anuncios de Maduro en materia económica
Desde octubre de 2018, el Banco Central de Venezuela (BCV) implementó una serie de aumentos al encaje legal que afectan la actividad económica del país al limitar la capacidad de la banca de otorgar créditos.
Recientemente, la ministra de Finanzas y vicepresidenta del gobierno de Maduro, Delcy Rodríguez, anunció la reducción del encaje legal, de 85% a 73%, como parte de una estrategia de flexibilización progresiva en ese aspecto.
El BCV ubicó el encaje legal en 85% para captaciones en bolívares tras la reducción en 8 puntos porcentuales ejecutada el 20 de enero de 2021. Adicionalmente, desde el 18 de septiembre de 2020 y hasta el 17 de septiembre de 2021 se mantuvo un descuento de 30 billones de bolívares semanales, que si bien no representaba una modificación en la política, constituyó una liberación de recursos que afectó a la economía porque generó un aumento de liquidez.
Al aumentar la cantidad de bolívares se genera una presión en el precio del dólar, porque en una economía hiperinflacionaria las personas destinan los recursos a la compra de divisas.