En el primer semestre de 2021, la producción y comercialización de bebidas alcohólicas por parte de la industria nacional de destilados aumentó 40% en comparación con igual periodo de 2020, según datos de la Cámara de la Industria Venezolana de Especies Alcohólicas (Civea).
“Estamos comparando un periodo (de) 2021 en que no hemos estado cerrados contra un periodo en el que estuvimos ampliamente cerrados en el 2020 y este es un elemento que explica este crecimiento inicial de la demanda y del sector”, dijo a El Pitazo, Luis Enrique Cárdenas, director ejecutivo de Civea.
Cárdenas aclaró que a pesar del aumento de actividad que se registró en la primera mitad de este año, el nivel sigue estando 11% por debajo del que alcanzó en 2019. “Nosotros venimos de una caída pronunciada muy importante desde el año 2015. Empezamos a caer y desde esa fecha hasta este momento nosotros no nos hemos recuperado”, afirmó.
El representante de la industria de especies alcohólicas señaló que, además de las restricciones impuestas por la cuarentena establecida para frenar la propagación del COVID-19, este sector ha enfrentado otros problemas como dificultades para contar con la banda legal que se coloca sobre las tapas de las botellas y certifica el pago de impuestos y la expansión del comercio ilícito de este tipo de productos.
“Ese comercio ilícito estaba todavía antes de la pandemia, era un tercio del consumo en Venezuela y durante la pandemia, como nosotros estuvimos restringidos y el sector ilícito no estuvo restringido tomó la ventaja del mercado”, destacó.
Según cálculos de Civea, la industria nacional de especies alcohólicas está usando en promedio entre 30% y 35% de su capacidad instalada. De acuerdo con sus datos, las empresas del sector generan alrededor de 4.000 empleos directos y 300 mil indirectos.