El año 2021 destaca por una ligera recuperación asociada al crecimiento de sectores como comercio y servicios. Mientras algunos economistas consideran que se trata de una burbuja a la que solo tiene acceso una pequeña parte de la población, otros celebran que este crecimiento se traduzca en bienestar para algunos

Unas calles caraqueñas abarrotadas de compradores, negocios y restaurantes llenos, y dólares que van y vienen, forman parte de la fotografía con la que Venezuela despidió el año 2021 y que contrasta con la realidad de años anteriores en los que el consumo se vio limitado por la crisis y la escasez de productos. Sin detalles ni cifras concretas, la recuperación fue celebrada recientemente desde el oficialismo, pero ¿se trata de un crecimiento real? Si bien existen perspectivas contrarias, expertos coinciden en que el mes de diciembre cerró con noticias positivas para Venezuela, desde el punto de vista económico.

“Pese a las sanciones criminales del imperialismo, estamos creciendo en la producción de alimentos, bienes, servicios; crece la industria, el comercio y el mercado interno, lo cual tuvo un gran impacto en el pueblo”, dijo Nicolás Maduro a la cadena libanesa Al Mayadeen, en entrevista transmitida el pasado primero de enero. En días previos, el gobernante aseguró, en un tuit, que el 2021 fue el primer año de crecimiento real de la economía tras una crisis que, desde su gobierno, atribuyen exclusivamente a las sanciones impuestas por Estados Unidos y otros países.

El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y el aumento del consumo son dos de los elementos que prevé la firma de análisis y consultoría financiera Ecoanalítica para este año. Uno de sus economistas, Luis Arturo Bárcenas, señaló en el evento Prospectivas 2022, organizado el pasado mes de diciembre por la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab), que, por primera vez desde 2014, el panorama es más optimista, pues la economía se mantuvo en 2021 igual que en 2020, con una caída de apenas 0,5 %.

Asdrúbal Oliveros, también economista de esta empresa, resaltó los sectores salud, alimentos, comercio minorista, cuidado personal y servicios profesionales como los grandes ganadores de 2021. “Obvio que el país no se ha arreglado, pero celebro esas muestras incipientes de recuperación que se dan en sectores claves, porque, al final, eso redunda en beneficio de todos”, escribió en su cuenta en la red social Instagram, el pasado 30 de diciembre. Como una “estabilización en el foso” definió Oliveros a la nueva etapa que atraviesa Venezuela, luego de una contracción de casi 80 % en 8 años. “Ha dejado de caer”, expresó.


Obvio que el país no se ha arreglado, pero celebro esas muestras incipientes de recuperación que se dan en sectores claves

Asdrúbal Oliveros

Al respecto, Bárcenas destacó el crecimiento de 3,1 % que, según los datos de Ecoanalítica, registró el sector privado en 2021, resultado que contrarrestó la salida del gobierno como actor económico y estimuló la recuperación. “Los minoristas fueron los más golpeados al inicio de la pandemia por el 7+7, pero los que más se han recuperado”, aseveró.

El economista y director del Centro de Investigación y Formación Obrera (Cifo), Manuel Sutherland, coincide en que Venezuela registró una recuperación económica. Sin embargo, considera que se trata de un proceso “poco potente”, limitado por las trabas que se desprenden de la estructura de la economía nacional. A juicio de este especialista, el aumento de los precios del petróleo, la capacidad del gobierno para sortear las sanciones de Estados Unidos, la flexibilización de las leyes cambiarias y de la cuarentena por el COVID-19 son las razones por las cuales se registró en el país una recuperación.

Repunte del sector comercial y la tesis de la burbuja

El hecho de que el crecimiento en Venezuela se registre desde el sector comercial genera, entre los especialistas, un debate sobre la realidad de la recuperación económica, especialmente tomando en cuenta el auge de bodegones o comercios de lujo a los que no tiene acceso la mayoría de las personas.

En una reciente entrevista con El Pitazo, el experto en finanzas y director ejecutivo de la empresa de asesoría financiera Index Global Corp, Luis José Barreto, consideró incorrecto que se pretenda generar crecimiento sin producir. A juicio de este especialista, en Venezuela se vive una economía de puerto en la que los importadores revenden y, con esas transacciones, trasladan la inflación externa al mercado interno; de ahí el aumento de los precios de los productos.

Barreto indicó que en Venezuela se aplica un modelo de negocios de retail, es decir, caracterizado por las ventas minoristas, el cual considera inadecuado para el crecimiento económico. Argumenta que el origen de estos establecimientos responde a tendencias de moda “que te hacen perder dinero sin visión a futuro, sustentabilidad ni estudio del mercado internacional y financiero”.


Todo hay que recuperarlo en el país y eso abre un enorme abanico de oportunidades de negocios, si el gobierno no se siente tentado otra vez a hacer de las suyas

Oscar Meza

En el año 2020, la firma Econométrica advertía sobre pequeños lujos a los que, en medio de la crisis, podía acceder solo una parte de la población cercana al 5 %, como comer en restaurantes, comprar un vehículo o viajar. Para el director de esta empresa consultora de finanzas, Henkel García, se trataba de un fenómeno derivado de la flexibilización de los controles gubernamentales sobre la economía que mostraba signos de recuperación, pero que no serían generalizados hasta que se tomaran correctivos.

El sector comercial y de servicios sería el más beneficiado de esta realidad a la que algunos sectores catalogan de burbuja y asocian, además, con personas o empresas relacionadas con el gobierno de Maduro.

Manuel Sutherland coincide con la posibilidad de considerar burbuja a las inversiones relacionadas con bodegones, tiendas y restaurantes de lujo. Según explicó a El Pitazo, la razón es que tienen un público más pequeño del que parece y buscan satisfacer las necesidades de consumo de una parte muy pequeña de la población. “Parece tener un techo más bajo del que algunas personas creen”, apuntó.


Las trabas que tiene la estructura de la economía nacional hacen que la recuperación sea poco potente

Manuel Sutherland

No obstante, el economista y director del Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas FVM), Oscar Meza, considera que en lugar de una burbuja se trata de nichos de mercado. El director del Cendas-FVM agregó que existe un segmento de la población cercano al 10 % que ha podido hacer negocios con el gobierno y este le permite, de alguna manera, invertir esos ingresos en comercios en los que ponen a circular dinero y generan empleos.

“No puedo asegurar la transparencia en cuanto al origen de esos fondos ni puedo acusar porque no tengo pruebas, pero, en todo caso, lo que expresa es la necesidad de invertir recursos, tanto de gente amiga y aliada del gobierno y, sin duda, eso genera un nivel de crecimiento económico nada comparable con lo que teníamos hace 10 años”, aseveró.

Meza considera imprescindible el área de comercio y servicios para el crecimiento de una economía y, en ese sentido, resalta la rapidez con la que puede crecer el sector comercial en comparación con otros, especialmente en Venezuela con los permisos de importación otorgados por el gobierno de Maduro. Igualmente, recordó que en el país es más fácil importar productos y colocarlos en el mercado local que producirlos, debido a las limitaciones que hay en materia de servicios. Señala que se trata de un resultado económico insostenible en el tiempo e insuficiente para recuperar la economía en términos generales, pero que genera empleo e ingresos a los trabajadores.

Condiciones para la inversión

Oscar Meza explica que los niveles de crecimiento que se registran en esos nichos pueden trasladarse a otros sectores, solo si se genera desde el gobierno un nivel de confianza para los inversionistas, situación que supone un acuerdo político.

“Todo el colapso de los servicios públicos conspira para que se realicen inversiones productivas en todos los espacios. Todo hay que recuperarlo en el país y eso abre un enorme abanico de oportunidades de negocios, si el gobierno no se siente tentado otra vez a hacer de las suyas y utilizar nuevamente sus esquemas ideológicos para complicar las cosas”, dijo a El Pitazo.


Los minoristas fueron los más golpeados al inicio de la pandemia por el 7+7, pero los que más se han recuperado

Luis Arturo Bárcenas

El respeto al Estado de Derecho y la protección a la propiedad privada son factores claves para poder invertir en dólares en Venezuela, asegura Meza. Asimismo, considera que la dolarización facilitaría el proceso, porque ya no es necesario depender del gobierno para que permita repatriar los dividendos, aunque actualmente limite la recuperación, debido a la incapacidad de la banca de otorgar créditos en dólares.

Advierte, además, que el proceso para que se den inversiones productivas luce lejano, porque no se ha resuelto la situación política. “La economía no se va a resolver plenamente sin una solución del problema político que requiere un acuerdo mínimo de garantías para que las inversiones se puedan dar en las magnitudes y volúmenes que se necesitan y en el tiempo, porque son inversiones de años”, concluyó.

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