Caracas.- La próxima temporada del béisbol profesional venezolano podría no contar con los equipos Navegantes del Magallanes ni con Tigres de Aragua, debido a que ambos equipos aún no aclaran si son o no entidades privadas ante la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC) de Estados Unidos.
De acuerdo a una publicación del portal El Emergente, a cargo del periodista deportivo Ignacio Serrano, el tiempo para que estas dos divisas criollas presenten los requisitos ante el ente norteamericano, autor de las sanciones que los privó de poder fichar jugadores de las Grandes Ligas, se agota.
Aún, tanto filibusteros como felinos, se encuentran, en gran parte, bajo tutela de los gobiernos regionales de Carabobo y Aragua, respectivamente.
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Serrano señala en su artículo que la Gobernación de Aragua domina en un 60% a los Tigres. Mientras, en Navegantes, la Gobernación carabobeña controla un 3% del club y la Alcaldía de Valencia tiene otro 3%.
Los estatutos indicados por la OFAC señalan que ambas entidades deben estar, en su totalidad, en manos de empresas privadas, sin ningún porcentaje de control por parte de entidades relacionadas con el gobierno de Nicolás Maduro. Esta fue una de las razones por las cuales sancionaron a todos los equipos en la pasada temporada.
La pena le fue quitada a los seis equipos restantes de la liga, pero bengalíes y turcos quedaron fichados.
Serrano también indica en su nota que tras consultar a cuatro altos directivos de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP), estos señalaron que solo faltan las modificaciones en los estatutos de las directivas de Magallanes y Tigres, para que se levanten definitivamente las sanciones de la OFAC contra la pelota venezolana.
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El presidente de la LVBP, Giuseppe Palmisano, indicó que se realizan conversaciones, bastante fluidas, con las directivas de ambos clubes, a fin de que ofrezcan una respuesta definitiva que le permita a la liga conversar con la OFAC.
Aunque no se precisa cuánto tiempo queda para concretar ese paso ante la institución estadounidense, las fuentes de la LVBP advirtieron a Serrano que no pueden esperar mucho.
No sería correcto que Tigres y navieros acepten jugar la próxima temporada en condiciones de inferioridad, ya que esto afectaría a todos los equipos. De hecho, el mismo Palmisano ya alertó, hace dos semanas, que existe el riesgo de poder celebrar la próxima temporada sin la participación de esas dos divisas.