Caracas.- Michael Phelps, nadador que durante su carrera olímpica ganó 23 medallas de oro, reveló en una entrevista que su salud metal se ha deteriorado a consecuencia de la cuarentena por coronavirus y teme que nunca se curará. El atleta admitió que se encuentra en una “situación atemorizante” y considera que atraviesa por una de las etapas “más aterradoras” de su vida.
La confesión del ex campeón olímpico se conoció a través de una carta publicada este martes, 19 de mayo, por ESPN. «La pandemia ha sido uno de los momentos más aterradores por los que he pasado«, dijo Phelps en la misiva, en la cual destacó que muchos de los deportistas están luchando contra sus demonios.
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«Las personas que viven con problemas de salud mental lo saben, eso nunca desaparece. Tienes días buenos y malos. Pero nunca hay una línea de meta al final», admitió.
Una de las ideas más fuertes que transmitió Phelps, fue cuando se refirió a que nunca encontrará la posibilidad de curarse del trastorno mental que padece, por lo cual deberá adaptarse y convivir con esa situación.
«Alguien que no entiende con qué lidian las personas con ansiedad, depresión o trastorno de estrés postraumático no tiene idea de lo que eso significa», señaló. Igualmente, describió cómo la terapia y el apoyo de su esposa, Nicole, lo han ayudado a manejar sus episodios de depresión.
En las últimas semanas dice haber dependido de las escapadas al gimnasio durante 90 minutos por la mañana cada día. «Si pierdo un día, es un desastre», aseguró, y explicó que en consecuencia se mete en un patrón negativo de pensamiento. Y cuando eso sucede, él es el único que puede detenerlo. Y normalmente no se detiene muy rápido.
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«Hay un montón de gente luchando exactamente contra lo mismo. No importa por lo que que hayas pasado, de dónde vienes o qué quieres ser», aseguró.
Asimismo, subrayó que el confinamiento es un desafío para él. «Me vuelve loco. Estoy acostumbrado a viajar, competir, conocer gente. Esto es una locura. Mis emociones están por todos lados. Siempre estoy al límite. Siempre estoy a la defensiva».
En este sentido, confesó en la carta que durante su carrera como deportista profesional la piscina era su escape, donde desahogaba toda su ira y la usaba como motivación. Pero ahora, hay momentos en los que se siente «absolutamente inútil» y su ira está por las nubes, lo que en ocasiones provoca fuertes discusiones con su esposa.