Caracas.- El Zamora venezolano asestó el jueves un resonante golpe en el grupo E de la Copa Libertadores, al acabar con el invicto de cuatro partidos del Cerro Porteño, con un triunfo de 2-1, que de paso le sacó del último puesto al que cayó el encopetado Atlético Mineiro.
La de hoy fue la primera victoria del Zamora tras 17 derrotas consecutivas en el torneo, y con los tres puntos se situó en el tercer puesto de la clasificación.
A pesar del golpe, el Cerro Porteño se mantiene como líder del Grupo E con 12 puntos, los mismos del Nacional uruguayo que marcha segundo por su inferior saldo goleador.
Antes del inicio del partido, poco parecía presagiar que el estadio Agustín Tovar La Carolina, en Barinas, sería escenario del pequeño milagro del Zamora, pues el equipo paraguayo había sellado con cuatro victorias sus cuatro anteriores salidas.
En el extremo contrario, un debilitado Zamora contaba sus partidos por derrotas y había recibido siete goles.
Sin embargo, al poco del comienzo el equipo blanquinegro avisó que no había acudido como mero espectador de lujo y el delantero Guillermo Paiva del Zamora, remató desde fuera del área un disparo que se fue lejos del arco defendido por Juan Carrizo.
Los malos presagios para el Ciclón de Barrio Obrero se consolidaron en el minuto 16, cuando el central de Cerro, Alberto Espínola, se lesionó y fue sustituido por Salustiano Candia, quien tampoco duró mucho sobre el terreno de juego, debido a que fue expulsado en el primer tiempo tras cometer un penalti.
El volante ofensivo Pedro Ramírez disparó un balón a la portería, casi vacía, de Cerro, y Candia ejerció de portero improvisado parando el balón con un brazo. Vio la roja directa.
Ignacio González transformó el penalti en gol para Zamora a los 45 de la primera parte. Luego, a los 51 del segundo tiempo, Ramírez apareció por el centro del campo y con un tiro de izquierda envió el balón al fondo de las redes, bien ajustado al palo.
Cuando parecía que el partido iba a ser un jornada de fiesta, Cerro Porteño apretó sus filas y consiguió acercarse en el marcador en el minuto 58, por medio de Nélson Haedo Valdez, quien superó al arquero Joel Graterol con un remate de cabeza.
El resto del partido fue una amenaza constante de los paraguayos que buscaron un gol que les permitiera, al menos, arrancar un empate.