La última semana de octubre el estreno del musical Los Miserables en el teatro Teresa Carreño causó un revuelo sin precedentes que no se debía exclusivamente a la novedad del evento, sino a que el precio de las entradas estaba expresado directamente en dólares americanos.
En Ticketmundo, donde se podía adquirir los boletos, se especificaba un precio de $30 para los puestos más económicos, y de $60 para las butacas más cercanas al foso de la orquesta.
Sin embargo, aún cuando se trató de una producción con un elenco que superó las 100 personas, las entradas fueron más baratas que las de musicales de factura parecida. Por ejemplo, en la página www.broadway.com, los tickets para ver El fantasma de la Ópera, un clásico del teatro musical, tienen un rango de precio que parte de los $49 hasta los $195.
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Chicago, otro clásico de Broadway, es incluso más costoso: su ticket más económico tiene un precio de $79, mientras que el más costoso tiene un valor de $199 en la misma página.
Para los conciertos de artistas nacionales, el reclamo es el mismo. El costo de las entradas para Nacho, de vuelta a casa parte desde los $15 (preferencial) hasta los $170 (VIP central).
Cúsica Fest, una iniciativa con dos días de duración (con fecha para 14 y 15 de diciembre) que reúne bandas venezolanas como Caramelos de Cianuro, Desorden Público, Malanga, El otro Polo y otras agrupaciones, tiene un precio de $35 para cualquiera de los dos días, y un paquete de $50 para ambos días. Actualmente solo quedan entradas disponibles para el sábado 14, pues el resto se agotó durante los primeros días de preventa web y venta física.
Sin embargo, los precios venezolanos siguen siendo más baratos. La entrada para un concierto de Coldplay, por ejemplo, se promedia en $94, mientras que la preventa para el concierto de Harry Styles en Francia comienza con un precio de 59 euros.
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